1 de enero de 2021

Haciendo la graciosa huida

Aún y cuando me quede más tiempo despierta de lo planeado, hoy me he despertado alrededor de las 9 de la mañana, por supuesto me quedé más tiempo en la cama, hasta que ya no pude más, o más bien me aburrí de estar acostada, así que me levanté y preparé un desayuno con un baso con kombucha, de la que tengo en el refrigerador, bastante rica, esta vez he sacado una de uva moscatel que mamá me dio hace tiempo.

Abrí ventanas y recogí todo lo que ayer dejé desordenado, y como no hice jugo de naranja, pues no estuve ansiosa de que pasara el camión de la basura, que por cierto no hizo, aunque el que si anduvo por acá fue el dichoso güero, el barrendero al que le paga tu mamá, esta vez casi limpio la cuadra, por lo que se ve bastante bien.

Me sorprendió que ya hayan estrenado una serie mexicana en Netflix, así que comencé a verla, solo que cuando me aburrí un poco me vestí y salí rumbo a la casa de las Chávez, me dieron ganas de pasar a verlas, cuando toqué el que me abrió fue Armando, le di su abrazo y, a lo lejos escuché un: “Abrazos virtuales”, al unísono, por lo que creo que así fue al inicio de año.

Estaban sentados a la mesa casi todos, digamos que los únicos que faltaban era tu primo Fernando, Xóchitl y nadie más, me recibieron más o menos, por supuesto Eliza y Fernanda muy serias conmigo, pero bueno, me ofrecieron algo de beber y todo continuó normalmente.

Comenzaron a jugar con el celular sobre adivinar algunas frases, animales o frutas, hice el esfuerzo para convivir, solo que como a mi no me ofrecieron jugar pues no hice mucho alboroto, luego bajaron una televisión para ver una serie, solo que no podían configurar el Roku que uno de ellos tiene, así que me ofrecí a llevar una memoria con una película, pero al llegar ya no fue necesario.

Así que pusieron una película bastante aburrida, fue ahí donde Cachito me dio a beber un poco de ese jugo de manzana espumoso que solíamos comprar, te acuerdas?, bueno pues cuando lo bebí casi me suelto a llorar, lo bueno es que al llevar el cubrebocas puesto nadie se dio cuenta de lo triste que me puse.

Por lo que en la primera oportunidad me he ido de ahí, eso y que me estuve mormando mucho por estar rodeada de los perros, a mi lado derecho el ahijado con sus perras, y a la izquierda Tamara con otro, así que me levanté y le dije a la comadre: “Al rato vuelvo”, y me fui de ahí, así que apenas entrando a la casa me di un buen baño con agua caliente, lo que hizo que poco a poco me sintiera mejor.

Y bueno Alex, un inicio de año tratando de relacionarme nuevamente con tus primos, con la comadre, con Blanca y bueno, con los demás, pero sabes, me haces muchísima falta.

Alex… ven por mi… TE AMO.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario