11 de enero de 2021

Buscando ofertas

Hoy si que me he despertado un poco tarde Alex, pero es algo lógico ya que no podía conciliar el sueño, creo que me vine durmiendo por ahí de las 2 o 3 de la mañana, ya ni me acuerdo, solo sé que me dio bastante frío, me puse otra cobija, me hice bolita y es lo último que recuerdo, ojalá fuera así de fácil poder dormir, pero bueno.

En cuanto me desperté revisé algunos pendientes y me aseguré de que todo estuviera funcionando bien, posterior a eso me hice un buen desayuno y lo acompañé con un jugo de naranja recién exprimido, últimamente estoy tomándolo todos los días, por lo que en cuanto pasa la basura corro para deshacerme del desperdicio, y pues hoy, en cuanto terminé de desayunar ya estaba sonando la campana.

Como era de esperarse, el resto del día estuvo muy tranquilo, de hecho, estuve revisando las redes sociales y terminé en grupos que se dedican a la búsqueda de ofertas en los centros comerciales más comunes, por lo que terminé adicionándome a los mismos, solo que en los de WhatsApp es más relajo que nada, y como sabrás soy enemiga de tener miles de alertas en el celular.

Por ahora no hay nada que me llame la atención, cosas para bebés, hombres y demás, nada interesante, pero al menos algo ya saldrá, más tarde mamá me ha estado bombardeando con sus llamadas pues en una de ellas mi voz sonó extraña, según ella se preocupa por mí, entiendo la situación Alex, pero exagera muchísimo.

Por supuesto que me cuido cuando salgo, siempre con el cubrebocas y alejada de las personas, aunque por una extraña razón ella sigue sin creerme, creo que estuvo a punto de soltarse a llorar cuando le dije que todo estaba bien, y ya sabrás Alex, su acostumbrado: “Y yo que voy a hacer sin ti”, estuve a punto de decirle lo mismo, pero preferí callar.

Termino el día dándome un buen baño con agua caliente, vaya que ha sido de gran ayuda el calentador solar, casi no gasto gas y siempre hay agua caliente, como solía ser cuando estabas acá Alex, aunque bueno, ni que decirte, era uno de nuestros tantos proyectos, te acuerdas?

No quiero llorar Alex, no quiero, pero cuando menos lo espero se me llenan los ojos de lágrimas, porsuerte mamá ya no llama a esta hora, si no se preocuparía más de lo normal y hasta buscaría la manera de venir a casa, pese a su discapacidad, por supuesto lo aprecio, es la única que realmente se preocupa por mí, pero exagera.

Alex… no puedo más… me haces muchísima falta… TE AMO.

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