1 de enero de 2019

Un par de calcetas completados

A pesar de las pocas horas que he dormido, me he levantado temprano, entre que es martes y tengo programada la alarme en mi celular y los vecinos amanecieron con espíritu fiestero, pues tenían la música a todo volumen, no me ha quedado de otra más que salir de la cama, doblar las colchas e irme al sofá, donde me quedé dormida varias veces, no podría decir cuántas han sido, pero me alivianaron bastante.

Justo a las 10 u 11 de la mañana, me manda un mensaje la comadre para que vaya a desayunar con ellos, cosa que hice sin problema, aunque no tenía mucha hambre, realmente quería quedarme sola y creo que hubiera sido lo mejor, ya sabrás porque.

Desayuné bastante rico, ahí, todos hechos bolas, desayunamos en casa de Blanca, donde Armando aprovechó para poner una película en la televisión de su mamá, una de miedo, ya que todos botaron por eso, ya sabrás que yo no, pese a todo me quedé a verla aunque apliqué tu técnica: “La de hacer chistes y preguntas en cualquier momento”, para romper la tensión que la película generaba, por suerte no ha sido tan de miedo, más bien ha sido de suspenso, cosa que agradecí y estoy segura que mi yo de la noche también.

Cuando terminó agradecí y me fui a casa, lavé mi poca ropa sucia, aproveché para sacar todo lo que estaba pendiente, deje la ropa en suavizante y lo que pude lo he tendido, de ahí he ido al centro comercial para hacer algunos pagos y cuando volví a casa, aproveché para terminar de lavar la ropa, es decir poner todo en la secadora, finalmente el día casi había terminado para mí, pues ya estaba oscureciendo bastante.

Así que, mientras veía la televisión, he aprovechado para acomodar dos de mis cajones de calcetas y ropa interior, al final acomodé toda mi cómoda y hasta me he dado el lujo de completar uno de los tantos pares de calcetines solitarios, puedes creerlo?

Y como te dije al inicio de este relato Alex, pese a estar rodeada de gente me he sentido tan sola, de verdad que me haces falta, además estas fechas no ayudan, y sobre todo porque se bien que terminando el maratón Guadalupe – Reyes, se vienen fechas difíciles.

Te extraño muchísimo Alex, terminé el año llorándote, y comiendo de la misma forma, ojalá pronto estemos juntos, duele mucho tu ausencia.

Alex… TE AMO.

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