31 de mayo de 2018

Bajando una norma y entregando papeles

Otro día más que he podido llegar tarde a la oficina, y no es que me haya quedado dormida, es simplemente que me levanto cansada y los 5 minutos de más se convierten en 30, así que me levanto rápidamente, me baño y preparo para ir a trabajar, por suerte solo estábamos Omar y yo, Don Jorge y Margarita llegaron poco tiempo después.

Y pensé que sería un día bastante tranquilo, pero a medio día me pide Vic que le busque una norma, la que no pude encontrar fácilmente, por más que intenté, hasta me desesperé un poco, pues por más trucos y demás cosas que ponía en el navegador, solo salían los mismos documentos de siempre.

Ahí a las quinientas encontré las tablas que necesitaba, solo que un portal de una universidad de Estados Unidos, y por más que intenté bajar todo el documento no pude, así que tuve que hacerlo hoja por hoja, puedes creerlo?

Además de una publicación bastante vieja, espero que le sirva, porque si me he llevado todo el día bajando hoja por hoja, sobre todo porque después de 5 o 10 debo esperar unos minutos para continuar bajándolas, una tarea muy pero muy tediosa Alex.

Y pensé en la vez que alguien me ayudó a bajar todo el contenido de un sitio, solo por unas imágenes, pero habría servido el mismo proceso para un libro?, quien sabe, eso pasó hace muchísimos años y ahora los navegadores han ido mejorando bastante, ponen tantos candados que fastidian la búsqueda, eso y que mi paciencia se agotó cuando no daba con la norma y ya habían pasado muchas horas.

Mientras volvía a casa, pensé en ir al cajero pues mamá necesita dinero, solo que me animé a ir de nuevo a la alberca, que está a un costado de la clínica, y pedir informes, hablar con el coordinador y, de ser posible, hasta llevarle un regalito, todo con el fin de tener un lugar ahí y poder ir a nadar de vez en cuando, solo que no lo encontré pues había revisión de no se qué, por no sé quién.

Así que charle con un maestro, de nombre Rafael, quien me dijo que me iba a ayudar, al principio me dijo que era difícil, luego que me ayudaría si le llevaba los papeles hoy mismo, pero como no tengo el dichoso certificado médico me dijo que el lunes, ni hablar Alex, sería hasta el lunes, al menos eso pensé.

Ya de regreso, y en compañía de la comadre y el ahijado, pase al cajero y volvimos a casa, ahí me anime a llevarle todos los papeles y decirle que el certificado lo llevaría hasta el lunes, pero me recomendó hacerlo de una vez, así que fui al centro comercial, a la farmacia y solicitarlo con el médico, quien me cobró 50 pesos por una revisión a medias, pero bueno.

Pude darle todos los papeles al maestro, y por más que insistí en saber hoy mismo si me aceptaban, terminé acatando sus instrucciones, así que será hasta el lunes cuando sepa si me dieron el lugar o no, ni hablar, ya me veía yendo mañana a comprar traje de baño, gorra y goggles, para entrenar.

Vuelvo a casa triste y sin ganas de ir al gimnasio, además aun me duelen los antebrazos, así que descansaré unos días más, aunque luego pague las consecuencias con Joel.

Te extraño tanto Alex… ven ya por mi… TE AMO.

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