28 de mayo de 2018

Reparando la fuga y con dos moretones

He pensado la mejor manera de “reparar” la fuga del tinaco por mi cuenta, así que pensé en dejar las llaves abiertas del baño y del deposito de agua para que se vaciara completamente, así cuando llegara pudiera ponerle plastiloka o algo para contener la fuga, y así hice Alex, por lo que aproveché en ir a la tienda en cuanto llegue a la oficina, ahí, en la sección de ferretería pude comprar la plastiloka y hasta una cinta de silicón para reforzar esa parte, según yo es solo donde sale el tuvo del tinaco, espero con eso quede, ya que de lo contrario tendré que hablar con tu hermana y estoy segura que se va a molestar.

Al final la cinta de silicón salió un poco cara, le comenté a mamá y terminé pagándola con la tarjeta, ni hablar, un gasto que no tenia contemplado, pero bueno, espero con eso ya no tener problemas o terminar pagando más, así que al llegar a casa, lo primero que hice fue lijar un poco para quitar suciedad, amase la plastiloka, la coloque y luego cubrí la sección con cinta de silicón, me cercioré en haber cubierto todo perfectamente y deje que el sol hiciera su trabajo.

Y como hace días vi que abrieron un local que ofrece entrenamiento genético, me dispuse a ir y tomar las 3 clases gratis, así que me vestí, tomé el par de vendas y me puse en camino, al llegar me dice el entrenador que las vendas eran más pequeñas, sin embargo, me sirvieron para cubrir bien las manos ya que me puse unos guantes y di golpes como en boxeo.

Lo malo fue que al quitármelos noté que, en uno de los golpes que di, me lastimé los nudillos, más que nada en la mano derecha y hasta comenzó a salirme un moretón, ni que decirte de los tendones en ambos brazos comenzaron a dolerme, ni hablar, creo que ese tipo de ejercicios no es para mí.

Ya en casa me he puesto un poco de pomada, pero nada, al final, y siguiendo una recomendación, me puse sábila caliente, según con eso evitaré que se me forme tremendo moretón, espero que sirva, aunque no sé si lo he hecho bien, según era poner a calentar (asar) un poco de sábila partida en un sartén y colocarla en la sección lastimada lo más caliente posible.

Pero apenas ponía la sábila caliente en la mano, me dolía bastante Alex, solo pude soportar ponérmela medio caliente, una vez hecho en ambas manos terminé dándome pequeños masajes y poniéndome pomada de árnica.

Termino el día cansada, adolorida y pensándote mucho Alex, seguramente me habrías regañado por haberme lastimado, pero entre tus regaños me habrías mimado mucho, extraño tanto tus mimos.

Alex… ven ya por mi… no tardes… TE AMO.

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