Visitando Tepotzotlán

Hoy me he despertado temprano, he tomado otra ruta para irme a casa de Belén, solo que tuve que llegar primero a casa de su abuelito, pues en la madrugada le dijeron que estaba ya muy mal, y lo estaba Alex, estuvo a punto de colgar sus chanclitas, imagínate cuan mal estaba que se le bajo tanto la azúcar y tuvieron que darle miel a fuerzas para que se subiera un poco y tenerlo en observación algunas horas más.

Cuando llegue ya todo estaba controlado y el señor se estaba dando a la fuga, por así decirlo, estaba ya de enojón y pidiendo su desayuno, aunque seguía la emergencia, pero al menos ya no tan urgente, así que nos pudimos ir a casa de Belén sin problema y de ahí a Tepoztlán, donde nos quedamos de ver con Abraham y otras personas.

Antes de llegar, hicimos una parada para pasar por la prima de David, y nos pusimos en camino, afortunadamente, me he llevado bloqueador solar, pues el sol estaba con todo, llegamos a un lugar bastante colonial, declarado ya pueblo mágico, por supuesto ahí comenzaron las bromas.

La visita estuvo bastante bien, aunque hubiera querido pasar más tiempo en el museo y recorrerlo todo, hasta tuvimos la oportunidad de ver como un coro extranjero practicaba en la iglesia, seguramente tenían un evento más tarde, y vaya que se escuchaba bastante bien.

Ni para que decirte todo lo que vimos, todo bastante opulento y a cada paso que daba, trataba de imaginarme la vida ahí en la época que fue construido ese lugar. Me agrado bastante notar que casi todos los visitantes eran nacionales, muy pocos extranjeros. Un lugar que te habría gustado mucho Alex, y estoy segura te habrías llevado de maravilla con Abraham, que es quien nos cuenta historias de cada lugar.

Al terminar el recorrido nos fuimos por nuestra parte, pasamos a dejar a la prima de David y de ahí al suburbano, Belén me acompañó gran parte pues, en una de las estaciones iba a recoger una gelatina que mandó a hacer para el hermano de David, ahí aprovechamos para charlar y, a parte de mamá, es ella quien sabe lo que planeo hacer, y creo que estoy bien, de todas formas me dice que cuento con ella y David, y sé que así será.

Ya en casa comí un poco mientras lavaba la ropa, espero que mañana venga la ratita y me ayude con la limpieza, que buena falta ya le hace a la casa.

Te extraño tanto Alex… ven ya por mi… no puedo más… TE AMO.