30 de mayo de 2018

Manejando un volvo

Tantas cosas en las que pensar Alex, cada que pasan situaciones, como la de ayer, me demuestran que el tiempo a vivir aquí ya es poco, no es que no quiera quedarme, es más bien que ya me estoy cansando de la actitud de tu familia y ahora con lo de ayer mucho más.

Así que todo el día en la oficina me he dedicado a buscar otro lugar al cual irme y comenzar a considerarlo como mi hogar, porque desde que te fuiste ya no tengo hogar, solo un lugar donde llegar a dormir, pasar un tiempo y ya, ni siquiera en casa de mi madre me siento bien, ya no tengo un lugar al cual refugiarme, pero bueno.

He visto en muchas partes, me sigue dando vueltas la idea que teníamos hace tiempo, pero no se si sea bueno el ya irme a ese lugar, tu que opinas?

Por la tarde he ido a encontrarme con el Ing. Harper pues me dijo que tuvo una consulta con el oftalmólogo y le dilataron la pupila, te cuento que desde hace ya mucho tiempo se que cuando te dilatan la pupila es indispensable que vaya acompañado el paciente, sobre todo porque su visión se limita bastante.

Lo mismo pasa con mamá, solo que con ella el efecto le dura bastante y dura algunos días con ojos rojos, de conejo como ella le dice, y su visión disminuye un poco, lo que no me tiene tan tranquila como digamos, pero esa es otra historia.

Así que le dije que iría a encontrarme con el para ayudarle con su coche y llevarlo a su casa, cosa que hice sin problemas, pero sabes Alex, me sentí bastante intimidada cuando me puse atrás del volante, nunca había manejado un Volvo, por suerte su casa está bastante cerca del hospital y pudimos llegar en menos de 15 minutos.

Claro que todo el camino estuve manejando tranquila y con suma precaución, sobre todo porque no llevaba mi licencia de conducir, solo tuve un pequeñísimo altercado con una tipa que no me dio el paso aun y cuando le puse la direccional, pero bueno, eso es el pan nuestro de cada día, fuera de eso lo hice muy bien y hasta lo estacioné sin ningún problema.

Me quedé en su departamento un poco más pues le calenté un poco de comida, he vuelto a casa ya un poco de noche, pero sintiéndome bien Alex, pese a todo creo que hice una buena obra, ayudar a alguien necesitado.

Sabes Alex, creo que no iré ya más a ese entrenamiento funcional pues me duelen los tendones de los brazos, y ni que decirte del moretón en la mano derecha, por fortuna la sábila funciono y no está tan morado como esperaba, solo un rosa más oscuro de lo normal, sin embargo, me duele apretar el puño, espero que con forme pasen los días disminuya la molestia, sobre todo el dolor.

Alex… me haces tanta falta… ven ya por mi… te espero… TE AMO.

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