31 de octubre de 2015

Las ordenes de tu mamá

Me he despertado temprano Alex, ni siquiera estaba cerca de la hora para levantarme, he desayunado y me di un baño rápido para salir de la casa a tiempo y tratar de tomar el trolebús, he tenido mala suerte ya que aunque lo espere por unos 30 minutos, no llegó y terminé tomando 2 camiones para llegar a tiempo.

Al llegar a Bellas Artes noté cuantos extranjeros habían, uno de ellos me impresionó por tener un tatuaje en español en su pie derecho el cual decía: “¿Porque no?”, otro extranjero me ha sonreído, solo me quedó corresponderle con otra sonrisa.

Margarita llego un poco tarde, pero en cuanto lo hizo nos pusimos en camino, llegamos a la misma calle que recorrimos hace años Alex, aquella donde compré mi vestido de graduación, pude recordar tu mirada al verme salir con esos vestidos puestos, casi me suelto a llorar pero la presencia de Margarita hizo que me contuviera bastante.

Recorrimos todas las tiendas, una a una, aunque nos desesperamos un poco porque aún no habrían, y eso que eran ya casi las 11 de la mañana, por fortuna hemos encontrado un lindo vestido para ella, es escotado y con dos tonos de negro, en cambio yo no encontré nada que me llamara del todo la atención.

Y eso pensé hasta que Margarita me mostró un hermoso vestido azul, el único problema ha sido el precio, salía completamente de mi presupuesto. Y ha salido el “Pepe miau” Alex, por más que me guste ese vestido dudo que me lo compre, además solo lo usaría en dos ocasiones, así que no vale del todo la pena.

Como dejamos en compostura el vestido de Margarita hemos tenido que perder un poco el tiempo para recogerlo, fuimos a la panadería Madrid pero estaba atascado de gente, volvimos y recorrimos las tiendas de nuevo, pero no me he probado algo. La verdad estaba más preocupada por irme pues ya eran poco más de las 2 de la tarde y a las 3 debía estar en casa.

Por fortuna he llegado a tiempo, nos dieron el vestido y salimos disparadas a tomar el camión, mamá ya estaba esperándome pero también ella salió rápido a comer algo pues se la paso charlando con tu mamá.

Hemos ido a dejarte flores, esta vez la lluvia no me importó el único problema ha sido que no pude ponerte el papel picado, por suerte Cecilia llevaba otro tipo de adorno de plástico, una guía negra con algunas calabazas. Tan grande era que alcanzó para todos, aunque un lugar ha quedado chaparrito, pero es la tía que me dijiste no te trató bien de niño, así que no me importó, solo lo puse y ya.

De ahí hemos ido por tamales, mamá ha comprado unos muy ricos, por supuesto tu mamá se ha hecho la loca y solo ha pagado los de ellos y trajo algunos para comer en casa. Al regreso hemos pasado para ver si podían cancelar la misa de hoy pues poca gente iría a casa de tu mamá, pero no encontramos al sacerdote, así que le he avisado a la Comadre para que vaya con el niño, al menos con ella ya seríamos 6 personas aunque al final también llegó Perla y su mamá.

Como siempre tu mamá se ha puesto a ordenar a diestra y siniestra, pero esta vez no hemos hecho mucho caso, aunque si se dieron cuenta como le ordenaba a tu hermana y a mí, al final todo ha estado bien aunque ni Victor o su esposa bajaron aunque fuese por mero protocolo, en fin, a si son ellos.

Los tamales que compro tu mamá han alcanzado para darles a Perla, su mamá, la Comadre y el niño, los demás no hemos comido pues ya lo habíamos hecho antes, aunque al volver a casa he comido la quesadilla que mamá me compro por la mañana, aún tenía hambre.

Espero poder conciliar el sueño temprano Alex, he puesto mi ofrenda desde ayer, espero te guste, mañana tengo pensado ir por algunos tacos dorados para ponerte.

Alex… ven por favor… no tardes… TE AMO.

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