1 de mayo de 2015

El karma

Después de haber llorado toda la noche me he levantado con los ojos muy hinchados, lamentablemente para mí no he podido seguir dormida por muchas horas como me hubiese gustado, por la mañana han estado tocando la puerta, al asomarme era tu hermana con más personas, aun siendo un día no laboral han tenido la suerte de vender material.

Me he puesto un suéter y bajé a abrir, casi corro de regreso a casa pues traía puesta mi pijama, la cual solo ha visto Cecilia y no dijo más, pero de no haber gente seguro se reiría de mi facha.

Después solo he dormitado un poco, pero me ha servido para descansar un poco más. Al levantarme y desayunar un poco me he sentido mejor, hablé con mamá respecto a lo que quería hacer el 10 de mayo, mi idea inicial era invitarla a comer, pero como ese día hay mucha demanda preferiría hacerlo este domingo, al final ella me ha dicho que le hace falta un pantalón de mezclilla y me ha cambiado la comida por eso.

Así que por la tarde he ido a comprarlo y aprovechar para comprar uno para mí ya que el que tengo se ha roto en el mismo lugar de siempre y comienza a molestar. Me vestí y con toda la calma del mundo he ido al centro comercial.

De hecho no me tardé mucho, fui a lo que iba, el pantalón y algunas frituras para estos días de asueto, como no encontré las frituras que me gustan camine a las cajas rápidas con la esperanza de encontrar algunas bolsas, mientras veía si había algunas una señora malhumorada me ha pasado en la fila, esta vez no he dicho nada en especial Alex, solo la deje pasar.

Y ahí fue cuando me he dado cuenta que el karma si existe, la persona delante de nosotras le ha puesto un tremendo pisotón sin querer que la puso a ver estrellitas, por no decirte otra cosa ya que ha puesto una cara de dolor que bueno.

Al mirar los pies de las señoras me di cuenta el porqué de esa cara, la señora de adelante traía semejante tacón y caminaba usando mucho sus talones, la señora malhumorada traía chancletas de gallito, sin más que le protegiera los pies.

Créeme que casi se me sale una carcajada, pero me contuve, solo una sonrisa que no pude ocultar se ha dibujado en la cara, ni hablar, al salir de la tienda no pude más y me he reído de esa señora. Seguro que ese pisotón me hubiera lastimado mucho el pie y hasta sangre hubiera salido.

Pero más tarde en irme que en volver, se equivocaron al cobrarme y fui a reclamar, ahí sí que me han hecho esperar mucho, maldito encargado.

Por la noche he salido a caminar un poco con Perla, supuestamente para comer algo, pero yo no tenía nada de hambre, solo pude compartir con ella unas papas, al final ella comió una hamburguesa con la tipa de siempre. Hemos hablado de tantas cosas, pero sobre todo de la boda de Victor, creo que al final no va a ir.

Alex… me haces mucha falta… ojalá pronto estemos juntos… te extraño… TE AMO.

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