Un tinaco vacio y sin candado

Hoy de plano no ha sido mi día Alex, pese a que la alarma del celular sonó varias veces, la apagaba y me acurrucaba en la cama, eso y que pasé una mala noche, otra madrugada en la cual me estuve levantando para ir al baño y, también, para cambiarme la playera por lo mojado que estaba, no sé si me haya dado temperatura o que se yo, pero casi la podías exprimir de lo húmeda que estaba.

Aunque me estuve levantando para verificar que mamá comiera un poco, por suerte ella ya está saliendo de la enfermedad, mientras yo apenas voy de subida, y en verdad me siento mal Alex, pero bueno, ella no puso objeción para comer lo que le di, y sabes Alex, siento feo ver el refrigerador casi vacío, y aunque tu hermana llama todas las tardes para saber cómo estamos, en ninguna de ellas ha dicho si necesitamos algo o si nos trae de comer.

Y es ahí donde reconozco que tu mamá si nos hubiera mandado de comer, quizá no diario, pero al menos unos días, solo que ahora nadie se ha tomado esa molestia, lo malo es que ni se antoja lo que tengo en la alacena para comer, lo que me ha tenido muy de malas todo el día, de hecho, casi no he comido, ni hambre tengo.

Por la tarde mamá recibió una llamada de su comadre, ella le llamó a mi celular, por supuesto las dejé charlando un buen rato en la recámara mientras me recostaba en el sofá, medio escuché la charla, ya cuando colgó me ha contado que su comadre llamo para avisar que alguien había violado el candado del tinaco que tiene enterrado.

En resumidas cuentas, le han sacaron el agua que ella tenía almacenada pues en ese lugar llevan días sin tener agua y son pocas las personas que si tienen, y pues ellos se han tenido que levantar de madrugada para sacar agua, pero ha salido muy poca y casi no han podido aparar, charlando con mamá le he dicho que ni modo, ahora que me sienta un poco mejor habrá que ir y ver quien pueda lavarlo y volver a llenarlo.

Esta vez le hice ver que, aunque sus vecinos obraron mal, y pues no queda de otra más que remediar el problema, quizá ir con el señor Armando y ver si puede revisar quien ha hecho eso, aunque lo dudo pues el cubo de las escaleras estorba la visión de las cámaras, pero bueno.

Y así el día de hoy Alex, me haces tanta falta, a veces imagino que habrías ido a casa de tu mamá para que nosotras pasáramos la cuarentena, o quizá habrías inflado el colchón y te habrías quedado en los cuartos de arriba, no se Alex, tantas cosas que suelo imaginar.

Alex… TE AMO TANTO… duele que no estés de este lado apoyándonos.