Lavando mucho

Vaya noche que hemos tenido ayer Alex, no sé si estaba muy cansada o el estrés me tumbo, pero me he levantado por ahí de las 10 de la mañana, por supuesto en cuanto lo hice le preparé algo a mamá para desayunar, aunque ella me insistió en hacer lo mismo solo pude tomar un vaso con jugo de naranja, sinceramente no tengo nada de hambre, estoy muy preocupada y estresada, sin embargo, tengo que continuar con las actividades diarias.

Prendí un rato la computadora para distraerme y vi algunos videos, funcionó por un rato pues a mamá le ha dado diarrea y termino ensuciándose toda, le he pedido que enjuagara su ropa en el baño y se bañara, por supuesto le di ropa limpia, pero tuve que subir y lavar todo lo que ella ensucio, afortunadamente ella enjuago todo, pero no lo hizo así con el baño.

Ya te imaginaras el asco que me dio lavar el baño, lo que me hizo recordar una frase de tu sobrino, y pues tiene razón, pero terminé lavándolo y con un rico aroma, aunque luego me toco enjuagar la escoba, que por suerte tenía una nueva en la recámara.

Mamá se apenó mucho, pero que le vamos a hacer, y pues me puse a lavar pues, a parte del accidente que tuvo ella, ha traído ropa sucia de su casa, sobre todo cosas pesadas que le dije yo le ayudaba a lavar, aproveché en echar la poca ropa que tenía y pues, los tendederos terminaron llenos, pero todo limpio y oliendo rico Alex.

Todo el día he estado tomándole la oxigenación a mamá, hasta hice una tabla para llevar un récord por si es de ayuda, eso y dándole la medicina a su hora, solo que hice cuentas y tuve que salir a comprar otras cajas pues no me va a alcanzar lo que le dieron en el seguro.

Como no tiene mucha hambre, le he cocido manzanas con azúcar y una gelatina, pero de nuevo comienzo a tener problemas para hacerla comer, tuve que morderme la lengua pues me trajo tantos recuerdos Alex, eso me hizo tener un humor de perros, ahora que lo pienso creo me estuve protegiendo inconscientemente, no se Alex, por supuesto tuve momentos de frustración y otros donde me solté a llorar, sin que mamá se diera cuenta, o quizá sí.

Por fortuna el oxímetro, que compré ayer, marca un poco más exacto, aun así, es baja su oxigenación por lo que ando atenta y al pendiente de ella.

Cuantos recuerdos tristes y feos, ojalá las cosas mejoren Alex… duele tanto.

Alex… ayúdame… no sé qué hacer… TE AMO.