21 de mayo de 2020

El programa que usabas

No he pasado una noche buena Alex, de plano me pasé la madrugada buscando el mosco que no me dejaba dormir, así que hoy me he despertado un poco de malas, con más ganas de quedarme en cama que otra cosa, sin embargo, me levanté y comencé el día de la mejor manera.

Mientras desayunaba comencé a resolver algunos pendientes, sobre todo con las personas a las que les estoy ayudando a hacer el respaldo de su información, vaya que me está llevando tiempo concluir con esos pendientes ya que dependo mucho de que los usuarios tengan disponibilidad, gajes del oficio.

Por la tarde traté de pagarle la renta a tu hermana, sin embargo me dijo que no me la recibía pues tiene pendiente entregarme mi contrato, que por cierto me debe el del año pasado, así que es la manera en la que ella, según, se va a presionar pues no soy la única inquilina a la que se lo debe, y pues no se Alex, me ha dejado un sabor de boca un poco extraño, pero bueno, así es ella.

Y me he pasado toda la tarde con los respaldos que te mencioné, entre que mi Internet estaba lento, la otra persona no tenía tiempo y había mucha información, se me fue el día, cuando menos lo esperé estaban metiendo el coche los inquilinos de tu hermana, esta vez no salí a saludar pues andaba en llamada con una persona.

Más tarde hablé con mamá, y charlamos un poco, aún está pendiente el mail que debemos mandar pero ella está haciendo memoria de todo para tener fechas verídicas en todo lo que quiere contar, así que lo hemos dejado pendiente, hasta me contó que todos, en su familia, ya se tranquilizaron pues los estudios de su mamá salieron bien, según lo que Cindy pudo checar, y bueno es una persona que tiene más de 90 años, no se puede esperar que tenga los mejores resultados, y menos con su estilo de vida.

Justo cuando estaba a punto de ver alguna película o serie, me contactó una persona, la famosa contadora, para que pudiera hacer el respaldo del correo, me pidió si podía ser a esa hora pues tiene muchas cosas que hacer mañana, así que accedí pero me llevó más tiempo de esperado pues el programa que suelo para acezar a su computadora no me permitió conectarme, tuve que usar uno que solías usar tu Alex, el famoso “AnyDesk”, cuando me lo mencionó ella casi me suelto a llorar, por supuesto he pensado tanto en ti.

Terminé por ahí de las 10.30 de la noche, quizá un poco más pues tuve que conectarme de nuevo a su máquina para checar una opción que puse mal, opción que me vino a la mente justo cuando estaba terminando de bañarme.

Así que hoy me has salvado una vez más Alex… desearía tanto que estuvieras a mi lado… te extraño tanto… ven ya por mi… TE AMO.

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