Sábado de hacer compras, desde ayer preparé lo que me iba a llevar con mamá, así que hoy en cuanto sonó la alarma del celular me levanté, lavé la cara, dientes y me vestí para irme hacia la parada del metrobús, apenas entré me dieron un poco de gel antibacterial, como era temprano no me he topado con mucha gente, sin embargo en cuanto llegue con mamá me lavé las manos y evité el contacto físico, aunque tenía muchas ganas de abrazarla, últimamente me siento sola Alex.
Llegue temprano, le ayudé a subir un poco de agua y desayuné con ella mientras juntaba la basura, en cuanto terminé nos pusimos en camino, por supuesto ambas llevábamos cubrebocas, lo que hizo que la gente nos volteara a ver, pero no me importa Alex, somos personas vulnerables, ella por su edad y yo por el asma.
Sin embargo, estuvimos atentas a nuestro entorno, evitamos aglomeraciones, de hecho, ni siquiera hemos ido al rodante, solo fuimos a comprar pollo, pescado, pan y algunas otras cosas más, creo que será el siguiente fin de semana cuando tendré que ir sola al mercado para comprar verduras.
Una vez terminado me regresé a casa para evitar la gente en el transporte, por suerte el pesero iba pasando y me esperó, en el metrobús paso algo similar, aunque si hubo gente no tanta como otras ocasiones.
Ya en casa dejé la bolsa y fui al rodante para comprar un poco de fruta, compré toronjas, mangos y fresas, hasta pasé al mercado por si encontraba algo más pero no, de ahí solo salí de nuevo para comprar agua, que no era tan necesaria pero bueno, yo y mis manías Alex. Extrañamente no he comprado tanta fruta como acostumbro, creo que será mejor terminarme todo lo que tengo en el refri, con decirte que aún no como ninguna guayaba de la semana pasada.
Una vez arreglado todo en el refri y el frutero, calenté un poco de comida y al terminar me iba a disponer a ver una película, solo que recordé que ayer no hice nada de la lista que hice por estar charlando con Carlos, ni hablar, manos a la obra, hasta eso el mueble de las tazas no estaba tan sucio como pensé, limpié el piso, lavé los platos y me animé a limpiar las macetas.
Más que nada porque la planta de cera ya estaba muy mal Alex, las hojas se doblaban y estaban ya muy amarillas, ni botones encontré. La primera maceta que limpie fueron mis papas, así que tuve una pequeña cosecha que pretendo cocinar con un poco de romero, luego fue la planta de cera y, sin pensarlo la he cortado toda Alex, total mi mamá tiene un retoño que prometió regalarme ahora que vuelva a ir.
Cuando menos lo pensé ya estaba muy cansada, pero seguí con el plan, así que quité algunas cosas, recorté algunas plantas, en otras quité plantas secas y bueno, saldo final: un brazo arañado por un rosal seco, piernas sumamente cansadas, espalda baja adolorida, toda llena de tierra, uñas mugrosas, pero sobre todo 2 bolas de puras yerbas.
Así que mañana, cuando venga el güero, me deshacer de ellas.
Después de un buen baño la vida es diferente Alex… sin embargo me haces tanta falta… ven ya por mi… TE AMO.
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