Como me quedé en casa de Belén, acordé con mamá de que iría mañana a verla, cosa que no le agrado del todo, pero accedió, no sin antes insistir en que le dijera donde vivía ella, por supuesto no le dije y cambie la plática en ese momento, pero bueno, solo para que lo supieras.
Me he levantado temprano, aunque esperé que los demás lo hicieran, desayuné con la familia de Belén pero me he regresado a casa temprano, ellos querían que me quedara un poco más y los acompañara al mercado, pero sinceramente ya me quería regresar Alex, ayer ha sido un día lleno de emociones y me sentía muy cansada.
Tomé el pesero que me llevo donde pasa el camión, ahí esperé un poco hasta que paso el indicado, llegue al Rosario y de ahí al metrobus, para estar en casa poco antes de las 2 de la tarde, en cuanto llegue le marque a mamá, le dije que ya estaba en casa y sin pensarlo, le pregunté si podía ir hoy a su casa por la comida, ella me dijo que ya estaba todo listo, y de nuevo accedió.
Así que me puse en marcha, tomé mis cosas y me fui a casa de mamá, pensé en quedarme con ella unas horas pero ella insistió en que me regresara, quizá porque me vio cansada, quizá no, aunque sentí un poco de resentimiento cuando me dijo que ya tenía todo listo para el desayuno de mañana, y hasta me preguntó sobre lo que iba a hacer con las zanahorias del jugo.
Le he dado algunas ideas de camino al pesero, que aceptó y hasta planeamos el menú de la siguiente semana, así que ya solo queda que no me lo cambie, como luego hace, pero no es algo que me moleste, lo acepto sin problemas Alex.
He ido a casa de mamá y vuelto en menos de 2 horas, una visita sumamente rápida, pero agradezco pues en verdad me siento cansada, además así aprovecho mañana en descansar, levantarme tarde y lavar la ropa sucia.
Antes de acomodar las capas en su lugar voy a darles una buena lavada Alex, buena falta les hace, aunque noté que se jalaron un poco de abajo, quizá de antes, quizá de ayer, sinceramente no quiero pensar tanto en eso Alex, no vale la pena, son solo cosas, no eres tú.
Es lo que siempre me repito cuando debo de deshacerme de cosas que compramos juntos.
Duele tanto tu ausencia Alex, de verdad… ojalá pronto vengas por mí… TE AMO.
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