Las cortinas

Pero que mal día he tenido hoy Alex, justo cuando me levanté entre en la disyuntiva de quedarme o ir a andar en bici pues el día estaba gris, y no sé porque preferí quedarme en casa, comenzar a lavar, justo en ese momento me ha entrado uno de mis tantos ataques de limpieza y me animé a lavar las cortinas de la recamara.

Se me hizo fácil quitarlas, medio limpiar esa zona, echarlas en la lavadora, para luego volverlas a colgar y listo, sinceramente no se en que momento pensé que eso iba a ser tan sencillo Alex, pues justo cuando comencé a quitar las cortinas de la ventana principal, una de ellas se rasgó, y debí haberme detenido ahí, coserla y dejarla colgada, pero no, seguí y las quite, las metí a la lavadora y hasta me animé a darles 2 ciclos pues el agua salía sumamente sucia, por supuesto pensé en mis alergias, en todo lo que he estornudado y me han afectado, pensé que quizá con eso iban a quitarse un poco pues soy alérgica al polvo, pero no.

Ha sido justo cuando las saque que noté el agua extraña, de aquellas 3 cortinas no quedaba nada Alex, los lienzos terminaron hechos pedazos, unos jirones, cual trepadero de mapache, no se ni cómo explicarlo Alex, todo se me vino abajo.

Esta vez no me eche a llorar tan rápido, me vestí, doble las cortinas rotas, las tiré en el basurero del mercado y me dirigí hacia la tienda de telas, busque y busque alguna parecida pero nada, como el chico que me atendió me recomendó ir a una sucursal más grande, aproveché para irme al centro, seguramente ahí las encontraría, eso pensé.

Tuve suerte en que pasara el trolebús, me subí y me dirigí al centro, caminé y caminé, le pregunté a Belén si ella sabía de algunas tiendas, pero siendo domingo encontré muy pocas abiertas. Pero si encontré algunas que me pudieran servir.

Solo que antes de pedirlas pensé tanto en tus palabras Alex, así que para que comprar 3 lienzos de tela muy caras si solo las iba a usar para oscurecer el cuarto, después de ver las únicas 3 tiendas abiertas, y analizar todas las telas que pude haber usado, cotizar y pensar fríamente, terminé por escoger una sumamente sencilla, como la que tenemos en la otra ventana, te acuerdas?, esa que de plano es toda liza, pues esa compré Alex, 3 lienzos de esa tela, pero como no había en esa tienda me he regresado a la casa.

Ahí me atendió otro chico, extrañamente uno guapo, pero me he distraído y terminé pagando 50 pesos más de lo que debía, por suerte me dije, mientras comenzaba a coser las cortinas, y regrese a la tienda, donde me ofrecieron darme los 50 pesos pero en mercancía ya que había solicitado factura y ya había sido hecha.

Terminé comprando tela para trapeadores y para hacer trapos de cocina, ni modo Alex, al menos no he perdido tanto como en mi tontería de lavar las cortinas, si al menos las hubiera solo limpiado, pero a no, quería lavarlas. Y ahora a terminar uno de tus tantos proyectos.

Me ha tocado a mí hacerlo Alex, terminar nuestro último proyecto juntos, el proyecto: “Cortinas”, te acuerdas?, lo que nos costó comenzarlo, lo que pasamos para ponernos de acuerdo con la tela, cuando comencé a coserlas, lo orgulloso que estabas de mí por hacerlo, lo orgullosa que me sentí cuando un día, llegue de trabajar, y ya estaban casi todas colocadas menos esa ventana.

No niego que me ha costado coser Alex, las nuevas, las que me faltaban, el no tenerte ahí, el ponerlas y toparme con el obstáculo de no tener uno de los apoyos, pero lo resolví Alex, al final quedaron bastante bien, de nuevo la recamara se ha oscurecido, de nuevo podré estar en ella sin tener de fondo la luz de la lámpara de afuera, sé que estarías orgulloso de mi Alex, el cuarto ha quedado más oscuro que antes.

Termino el día cansada, orgullosa de haber cocido tanto, triste por terminar un proyecto que comenzamos juntos, triste por no tenerte, molesta por haber hecho un gasto que no tenía previsto, pero sobre todo llorando por tu ausencia.

ALEX… TE AMO.