Hoy me he quedado de ver con David y Belén en la puerta de los leones en Chapultepec, así que tomé el metrobus e hice un transbordo, por suerte he salido con bastante tiempo y pude evitar el problema de que, siendo domingo y por el paseo dominical, no había paso hasta allá, la última parada fue una estación antes de Chapultepec, así que no me quedó de otra más que caminar, y para no variar he sido la primera en llegar al lugar acordado, los demás comenzaron a llegar pasados los 30 minutos, siguiendo la "tradición mexicana de llegar tarde a cualquier lugar", pero está bien Alex, prefiero ser la chica que llega puntual a las citas que ser la última en llegar.
El estar ahí me trajo hermosos recuerdos, de alguna manera eso me puso bastante triste ya que fue contigo con quien recorrí esos pasillos, con quien vi algunos puestos y caminé por esos senderos Alex, yo y mi afán de hacer algo cultural cada mes, te acuerdas?, aquella vez fuimos al castillo, caminamos por sus entradas, por sus pasillos, por todas partes, algunas veces lo hacíamos separados, otras no tanto, pero siempre me dabas mi espacio para colarme y tomar una que otra fotografía, ah como me gustaba tomar fotos de todas partes, aunque pocas veces lo hice de nosotros, maldita costumbre de no hacerlo.
Y bueno, eso pensaba mientras los demás comenzaron a llegar, primero lo hizo Abraham y luego David con Belén, mientras caminamos nos encontramos con otra persona, quien se agregó al paseo y llegamos a las puertas del castillo, ahí pude verte de nuevo, en aquella vez que estuvimos de monitores, recuerdas?, peleando con niños que no eran nuestros hijos y de vez en vez rozando nuestras manos en un gesto de ternura y amor, y mientras recordaba eso cruzamos la entrada.
Me centré en los comentarios que Abraham nos hacía con respecto a la construcción y algunas anécdotas de Carlota, aunque no niego que de vez en vez dejaba de escucharlo para buscarte entre la gente, solo que no te encontré Alex.
El llevar lentes oscuros me ayudo a disimular una que otra lágrima, hubo un momento en que Belén se me quedó mirando y fue ahí donde simplemente le dije: “la última vez que estuve aquí fue con Alex”, ella solo permaneció de pie y me dio un pequeño abrazo, y seguimos caminando, aunque no duró mucho el trayecto pues a las 2 Abraham tenía otra cosa que hacer, así que de ahí nos hemos ido al mercado de la Morelos, un lugar bastante peligroso pero como íbamos con David no nos pasó nada, a el lo conocen mucho así que íbamos bastante relajadas, aunque cuidándonos entre nosotras pues el se quedaba a charlar con todas las personas ya que solía trabajar ahí.
Y fue ahí donde consiguió un nuevo método que promete ayudarme a relajarme y conciliar el sueño profundo, uno que quizá habría probado contigo Alex, solo que espero no termine adicta a eso, ojalá que no, pero bueno, todo sea para poder dormir bien que buena falta me hace.
Terminando de hacer sus cosas fuimos a comer tacos, solo pude comer uno y ellos un poco más, de ahí me trajeron a la casa y se fueron, aunque bueno, me explico el como debo usar lo que me dio para dormir, por lo que ya en la noche lo he probado, aunque por el momento solo me ha hecho bostezar bastante, espero funcione Alex.
Alex… te extraño tanto… ven ya por mi… TE AMO.
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