He pasado mala noche Alex, y todo por culpa de un maldito mosco, no es que deje todas las ventanas abiertas, más bien creo que se metió por la ventana del baño, que siempre abro después de bañarme, y por más que busque no di con él, de plano hasta le deje uno de mis brazos para que se diera un festín con el objetivo de dejarme dormir, al final no funcionó.
Cuando por fin creí que se había ido el mosco, comenzaron los vecinos, estuvieron hasta que el sol casi sale, entre risas, música, diálogos y demás, pues tampoco me dejaron dormir, por lo que terminé prendiendo la luz y tratando de leer algo, solo que me sentía cansada y no quise forzar la vista.
Se fueron por ahí de las 5 o 6 de la mañana, así que he tenido al menos unas 2 o 3 horas para medio dormir, cuando sonó la alarma del teléfono traté de darme unos minutos más, sin embargo, me he levantado a los 15 minutos, me metí como pude al baño para bañarme y tratar de despertar, cosa que logré, aunque mis ganas eran más de quedarme en casa, poco faltó para reportarme enferma y dormir todo el día.
Sin pensarlo he terminado llegando tarde, por suerte Vic andaba ocupado y creo que ni cuenta se dio de la hora, además poco tiempo después llego Margarita, a la que también se le hizo tarde, así que cada quien se concentro en sus asuntos y casi no hablamos.
Para que no se viera tan feo, me he ido más tarde de la oficina, aun y cuando casi no tengo cosas que hacer, aunque siempre ando al pendiente de las conexiones a la vpn, aunque creo que la única que realmente la usa es Margarita, y no de la forma correcta, pero bueno.
Ya en la tarde he ido a hacer un poco de ejercicio, me aburre que ni Cristian y mucho menos Mauricio le den continuidad a lo que me ponen, siento que solo me indican que hacer para salir del paso, pero no ven mis avances y mucho menos se preocupan de sus clientes, comienzo a pensar que al menos Joel, dentro de sus payasadas, era mejor entrenador, ni hablar.
Hoy te he extrañado muchísimo Alex, confieso que en el día te pienso y recuerdo, pero por las noches me entra la nostalgia, la añoranza y de la nada comienzo a llorar.
Alex… ven por mi… TE AMO.
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