12 de agosto de 2018

Gases estomacales

Hoy me desperté con más ganas de quedarme en cama que salir, sin embargo, al levantarme y comprobar que el día estaba gris me vestí y preparé para andar un rato en bici, así hice hasta que el sol comenzó a aparecer, más o menos cuando estaba por tomar rumbo hacia la condesa, momento en el cual preferí seguir derecho e irme a casa, no sin antes pasar a que cambiaran los baleros de mi bici, solo que la tienda no abrió, así que me vine directamente a la casa Alex.

Y creo que hice bien, pues apenas llegue el sol se levantó en su máximo esplendor, así que, mientras limpiaba un poco la casa y me bañaba, lavé una colcha de las que suelo usar normalmente, todo con la finalidad de que oliera rico.

Por la tarde, he ido al supermercado con el ahijado, charlamos de cosas sin mucho interés mientras caminábamos, nada fuera de este mundo, solo una charla normal, el único pero fue cuando traté de hacer el pago de cada mes, tuvimos que hacer dos filas ya que solo un cajero estaba disponible, pero pude hacer la transacción y de ahí fuimos a la tienda para comprar algunas cosas.

Aunque traía en mente comprar limpiador para piso, lo olvide y compre otras cosas, pensé en regresar, pero como el cielo se tornó gris, preferí volver para quitar la colcha que había tendido pocas horas antes, y corrí con suerte Alex, pues cuando lo hice la colcha estaba seca.

Más tarde he ido a charlar con el Ing. Harper, sobre todo para que me contara bien lo que le sucedió el miércoles, sigo pensando que es algún tipo de charlatán, pero me hace dudar el que les dijera cosas que solo ellos sabían, sobre que su hermano había sufrido un paro cardiaco mientras lo operaban o que el tiene el corazón horizontal, me dijo que hasta se le había olvidado a él.

La charla giro entorno a ese tema, solo que en hubo un momento en el cual me sentí bastante incómoda, más que nada porque comencé a tener muchos gases estomacales y en varias ocasiones tuve que ir al baño para despejarlos un poco, así que preferí retirarme de ahí con dolores, que poco a poco fueron disminuyendo.

Terminé regresando a casa en metro, esta vez no use el metrobus, y lo lamente un poco pues al salir del metro y caminar a casa comenzó a chispear un poco, al llegar a casa pase por el teléfono y charle con mamá mientras ponía la ropa en la centrifugadora para luego dejarla en la secadora.

Espero poder soñar contigo hoy Alex, me haces tanta falta.

Alex… TE AMO.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario