26 de enero de 2018

La cara de Cecilia

He tenido un día tranquilo en la oficina, solo que por x o y terminé saliendo más tarde de lo acostumbrado, además traté de comprar el garrafón de agua que ayer me terminé, justo lo buscaba cuando Cecilia me llamó para preguntar si iríamos a comprar las flores, le dije que si y le mencioné un tiempo aproximado en que llegaría.

Para variar cuando llegue aun no cerraban la tlapalería y creo que se sorprendió al verme ahí, ha sido tu sobrino quien le mencionó que ya casi eran las 6 de la tarde, por lo que se apresuraron a cerrar todo, nos hemos ido de ahí unos 15 minutos después.

Afortunadamente encontramos lindas flores, he comprado unas de color rojo que combinaré con unas amarillas, un poco caras y casi no me alcanza el dinero, pues como mamá me encargo unos claveles terminé pagando el ramo que me fiaron hace tiempo, aunque estoy casi segura el señor no se acordaba preferí hacerlo, finalmente no me voy a dar a conocer por 20 pesos.

Nos topamos con bastante tráfico de regreso, pero lo más remarcable ha sido que cuando le dije a tu hermana que mañana no podría llevar las flores a puesto una cara de pocos amigos, mi escusa ha sido que iría a trabajar, y se bien que no puede oponerse a ello, bien decía tu mamá que nunca hay que dejar el trabajo a un lado, “El trabajo es primero”, recuerdo que varias veces me dijo.

Hemos quedado que mañana me avisa si vamos el domingo o no, le ofrecí ir ese día, pero temprano, según ella ese día se lo pasa con Andrea, aunque estoy segura de que solo unas pocas horas pues más tarde ella se va con su novio y su hermano sale con su esposa, pero bueno.

Antes de meterme a la casa he limpiado las flores, mañana tengo varias cosas que hacer y no quiero llegar tarde a ninguna, como le digo a mamá: “gano tiempo al tiempo”, así que mientras charlo con ella y le cuento un poco de mis planes limpio las flores, mañana cuando vuelva se las paso a dejar a Cachito antes de irme al museo, así no ando a las prisas ni me pongo de malas.

Termino el día cansada, hice más cosas por la tarde y noche que en el día, pero lo que siempre hago es extrañarte.

Alex… ven ya por mi… te espero… y TE AMO.

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