26 de marzo de 2017

Recuperando los patines

Aun y cuando me he dormido tarde no pude quedarme mucho tiempo en cama, me he despertado por ahí de las 10 de la mañana, a las 11:30 me llamo el ahijado para decirme que no estaba en su casa y apenas iban a desayunar, por lo que debía pasar por el después de mediodía, hora que habíamos acordado anteriormente, así que me he quedado en pijama más tiempo.

Apenas iban a dar las 12 cuando escuche ruidos en la puerta, al asomarme eran las Chávez y el ahijado, como aun traía el pijama le di las llaves para que entrara, tuvo que esperar un poco mientras me vestía para irnos, el niño ha pensado que iríamos a patinar, creo que no entendió bien lo de “caminar e ir por mis patines”.

Antes de irnos hemos pasado a su casa por la tarjeta del metrobus, afortunadamente su mamá le ha dado dinero para que se comprara lo que quisiera. La primera parada ha sido Rio Bamba, nos bajamos y comenzamos a caminar entre las calles, como solíamos hacer nosotros Alex, inventando historias en las casas que nos gustaban y charlando de mil cosas.

La segunda parada ha sido la nueva plaza comercial, hemos entrado y dimos vuelta entre los pasillos, encontré buenos productos que quizá llegué a comprar, muchos de los cuales te gustarían y hasta compraríamos. Después dimos una vuelta a la plaza, casi no hay locales abiertos y encontramos una sucursal de la tienda para mascotas a la que fuimos en estados unidos.

Por supuesto que el niño se ha emocionado, sobre todo porque quiere comprarle muchas cosas a su perrita, hemos quedado en volver cuando ya esté toda funcionando, con decirte que aún no abren el 2do piso que, seguramente, será el área de comida y quizá hasta cine van a poner.

De ahí fuimos a otra plaza, la que íbamos mucho Alex, mientras le contaba historias de ti nos ha dado sed y compramos, cada quien, agua simple, he de decirte que no duramos mucho ahí pues ambos ya conocíamos ese lugar, afortunadamente para mi pues comenzaba a sentirme mal por tantos recuerdos.

Posterior a eso caminamos hacia la pista de patinaje, ambos ya íbamos cansados, al llegar nos saludaron amablemente, pero pues ya no es como antes, llego un momento en el cual me sentí relegada ya que casi no me hacían caso, es de comprender Alex ya que estaban trabajando y yo no.

Me han entregado mis patines bastante gastados, pensé en reclamarles, pero ha sido más bien mi culpa por haberlos dejado ahí, los revisé y comprobé que estaban bien y ya cuando íbamos de salida ha comenzado a llover, por lo que tuvimos que aguardar ahí un buen rato, nos ha servido para descansar pues si hemos caminado bastante hoy.

De camino a casa nos ha espantado un vagabundo, también nosotros de metiches, llegamos a un edificio que al pasar lo vimos cerrado y en ese momento estaba abierto, dije dos veces “hola” y salió un señor que nos espantó y terminamos corriendo, hasta el dolor en los tobillos se me olvido, aunque me dolió bastante al llegar a la esquina, corrimos de esquina a esquina.

Pura risa ha sido hasta llegar al metrobus, pero caminamos un poco más pues a ambos se nos antojó el pan que venden por el hospital, solo que la chica no se puso hoy, así que terminamos de nuevo en el puesto de los tacos, él se comió 3 y yo 2.

Como verás estoy muy cansada Alex, espero que sirva para ya no pensar en lo que pasó hace días, sigo trabajando en ello, aunque pensando en lo que hable con Perla.

Alex… duele mucho… física y emocionalmente… ven ya por mi… TE AMO.

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