18 de marzo de 2017

En el hospital con mi tia

Es curioso Alex, ayer no me he tomado la pastilla para dormir y me he ido a la cama temprano, por lo que hoy he despertado sin problemas a las 8 de la mañana, creo que era un poco más temprano, con decirte que he llegado a casa de mamá como a las 9:30 de la mañana, por suerte ya estaba lista, después de meter la leche al congelador y poner las flores en agua llevamos las otras con sus vecinas.

Primero la señora José, le he agradecido lo que ha hecho por mamá y luego a la señora Carmen, aunque más bien debí dárselas a su esposo, pero bueno, lamentablemente la señora estaba indispuesta y no salía de la cama, se las dejamos y nos pusimos en camino para el centro médico.

Como a mamá no le gusta caminar por abajo, hemos ido hacia la otra línea por arriba, casi siempre me desespera la forma que tiene mamá de contar las cosas, lo hace muy como chisme, pero hoy he dejado que hablara sin decirle nada.

Llegamos por ahí de las 10 de la mañana al centro médico, entramos al restaurante y pedimos algo para comer, he aprovechado el dejarlas solas para que charlaran mientras yo respondía algunos mensajes de Omar, me ha dicho que no había internet en la oficina y se estaba desesperando con sus hijos, pero quien le manda ir con ellos.

Tuve que poner mi cara de pocos amigos cuando le trajeron a mi tía su sándwich, porque ella no come nada integral o con semillas, según ella porque es alérgica, así que hemos pedido nos prepararan uno con pan blanco, al final no ha estado rica la comida ahí, ya luego nos dijo ella que cuando fue tampoco la atendieron bien, cosa que molesto a mamá pues debió habernos dicho y hubiéramos ido a otro lado, pero bueno, lo peor ha sido la cuenta, afortunadamente mamá ha pagado, solo puse la propina.

Y de ahí fuimos al mercadito de ruedas que se pone los sábados, tenía ganas de comer una marquesita, pero al llegar al puesto no había nadie, según nos dijeron se habían ido y en una hora regresaban, no nos quedó más que regresarnos, aunque creo que sería bueno ir para desayunar, la comida ahí se veía rica, mucho mejor que en el restaurante.

Aunque me arrepiento de haber desayunado en ese lugar creo que servirá para que mi tía no llegue a decir que la llevamos a un lugar feo, ya sabes cómo se las gastan Alex, mamá ha estado de acuerdo, aunque tampoco le pareció el precio de la comida, por suerte no volveremos a ir, y de hacerlo creo que desayunaremos en otro lado.

Por suerte he regresado a casa a tiempo para descansar un poco, guardé la comida que mamá me ha dado y fui a casa de tu mamá para irnos a llevarte flores, según Cecilia quería irse temprano, pero terminamos saliendo hasta las 3 de la tarde, bastante tarde pero no lo suficiente para que el Pato nos acompañara, ya casi para llegar me marco para preguntarme donde estábamos, al final le he dicho que será para la próxima vez ya que no iba a alcanzarnos y había otras cosas que hacer.

He de decirte que todo el camino tu mamá ha estado dormida, no entiendo cómo puede estar todo el tiempo sentada y en mala posición, pero Cecilia me dice que lo mismo pasa cuando está en la tlapalería, al parecer la medicación que le dan es muy fuerte., varias veces se despertó preguntando en donde estábamos, se norteo bastante.

Terminamos yendo a la tienda para que Cecilia comprara algunas cosas, entre ellas yogurt y algo para comer, además, ya casi al llegar, han comprado una torta en uno de nuestros tantos lugares, creo que serán ahora de su preferencia, le gustaron mucho a Cecilia, lo único que no me ha gustado es que no me ha ofrecido comprarme una, creo que ha sido por el comentario que hice, creo que dije que yo no solía ya comer tortas.

Terminé comiendo algo sencillo en casa, con bastante hambre y mirando televisión, ya mañana será otro día, además Belén me mandó un mensaje para que la acompañe a comprar un libro, espero encontrar el nuevo de Anne Rice.

Me has hecho mucha falta hoy Alex…. Te extraño.

Alex… ven por mi… TE AMO.

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