18 de agosto de 2016

La araña

Hoy me he levantado con bastante tiempo para arreglarme e irme a la oficina, pese a que no he dormido lo suficiente, así que después de desayunar y preparar mi lunch me he ido a la oficina, para mi sorpresa no me he encontrado tráfico así que llegue temprano, solo estaba Don Jorge y Vic en el taller.

Poco a poco comenzaron a llegar los demás y mientras resolvíamos cada uno nuestros pendientes la mañana se ha ido volando, cuando menos lo esperamos ya era tiempo de ir a comer. Y creo que he tenido mala suerte o el arroz que mamá me preparó ya no está en las mejores condiciones, cuando lo comí me supo un poco extraño.

Los demás han usado muy poco el microondas, de hecho, creo que solo Margarita y yo lo hemos usado más pues ella también ha ido a calentar su comida. Aunque siendo sincera se me ha antojado bastante el espagueti que traía para comer.

La tarde ha sido un poco más pesada, entre arreglar algunas cosas y ver que la nube trabajase bien se me ha ido el tiempo, luego he charlado un poco más con Vic para organizarnos en lo que hace falta del sistema de calidad, por ahora debo esperar a que César desarrolle los formatos y me los envíe para tropicalizarlos a la manera de la empresa, que más bien es a la mía Alex y hasta eso han quedado bastante bien todos los que he desarrollado, pero bueno.

Ya en casa he pasado a saludar a tu mamá, no me he quedado mucho tiempo pues cuando llegue hablaban de algo con su trabajador y apenas me vio Cecilia le dijo: “Bueno ya váyase”, seguramente ha sido un chisme de la colonia o de algún vecino, pero bueno, creo que la forma y el momento no ha sido el adecuado, en fin.

En casa he comido fruta y me fui a la cama para descansar un poco, sin pensarlo me he quedado dormida y curiosamente me desperté a las 7 con 10 minutos, justo a tiempo para ponerme la ropa deportiva e irme al gimnasio. Al llegar me han saludado bien y notaron que traía bastante sueño, situación que no ha sido limitante para ponerme a entrenar, según ellos el ejercicio me despertaría, pero no lo hizo, hoy he trabajado más que nada los brazos y vaya que me ha costado bastante.

Justo cuando iba llegando a casa noté en el foco de los cuartos de arriba algo se movía, al subir noté que una enorme araña (bueno no tanto Alex, pero si más de lo usual, de esas que son grandes, como una moneda de 10 pesos y con la parte trasera muy abultada) estaba devorando otra pequeña araña.

Mi primera reacción fue de miedo, luego pensé en observar bien la araña e identificarla, si era nociva pensaba en dejarla vivir ahí, pero y si no lo era?, además como identificar una araña en la noche y sin conocimientos?, así que opté por una mejor solución, fui por una escoba, deshice la telaraña y aprovechando que la araña se hizo bolita la he tirado al piso y antes de que reaccionara le di tremendo pisotón, solo he sentido el piso bajo mi pie, ni sentí como la mataba, por un segundo temí que saltara y me mordiera, aunque ahora que lo pienso eso hubiera sido una buena opción para reunirme contigo, si la suerte me favoreciera y fuese venenosa.

Solo que no soy fan de las arañas Alex, no es que les tenga miedo, más bien prefiero mantenerme al margen y dejarlas vivir siempre y cuando no interfieran en mi camino. Espero sea la única araña de ese tipo en la casa y no sufra algún tipo de represalias por algunas otras.

Al terminar de cenar y lavar los trastes sucios me iré a la cama Alex, realmente tengo sueño y quiero dormir temprano.

Alex… me haces tanta falta, ojalá pronto estemos juntos… ya no quiero estar más aquí… TE AMO.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario