18 de julio de 2016

La cita de mamá y tu mochila

De nuevo me ha costado mucho levantarme de la cama, sigo padeciendo la cruda de sueño Alex, pese a que hoy he dormido un poco más pero tuve que levantarme a las 7 de la mañana, mucho antes de que mamá comenzara con sus cosas, el ambiente sigue bastante pesado desde ayer y me incomoda estar así Alex.

Después de vestirme salimos de la casa para tomar un taxi, mi idea era irnos en el metro bus pero iban llenos, quizá por la hora, además de que la cara de mamá no ayudaba del todo. Esta vez el taxista se ha ido por un camino más rápido y estuvimos en el hospital mucho antes de las 8 de la mañana, cuando llegamos lo primero que hice fue ver si aún iban a dar la consulta ahí o donde antes era.

Mientras caminamos hacia el otro lugar nos topamos con la estudiante del doctor, le dimos el carnet y de ahí a esperar, la mayor parte del tiempo tuve que hacerlo de pie pues casi no había lugares, por suerte mamá si pudo sentarse.

Fue hasta que me acerque a la puerta del doctor que me reconoció y solicitó le pasaran a mi mamá para revisarla, de nuevo han tenido que dilatarle la pupila para descontento de ella y esperamos unos 20 minutos a que le hiciera efecto, ahí de nuevo ha puesto su cara pues nadie quiso cederle el asiento.

Como el espacio es bastante reducido tuve que esperar afuera, aunque mamá me dice que ya está mucho mejor y el nervio óptico está mucho mejor, así que el médico le ha dicho que debe seguir con lo que está haciendo y comiendo muchos frutos rojos, eran ya las 10 de la mañana cuando pasamos a la tienda para comprar mi helado y consultar algo de mamá con su tarjeta, de ahí a la casa.

Y justo cuando todo iba más tranquilo mamá me desespera de nuevo, a veces ya no se ni que creerle Alex pues primero me dijo que el señor del taxi iba a llegar en 10 o 15 minutos, luego que no había dicho eso e iba a llegar después de 30 minutos, cosa que me hizo molestar bastante y le reclamé por no decirme bien las cosas.

Según ella la pongo nerviosa pero no entiendo porque ya que le he hecho preguntas muy simples, en fin. Aproveché para que me dieran un aventón a la casa de camino, finalmente pude estar en la oficina a las 11 de la mañana, hubiera deseado que fuese más temprano pero que le vamos a hacer.

Todo bien Alex, el único inconveniente es que el doctor quiere verla la semana que entra, veremos cómo nos organizamos ya que no puede ir sola por la dilatación de la pupila, ni hablar. Hoy me he llevado una de tus mochilas a la oficina, la otra ya está muy mal y ha comenzado a romperse Alex, solo que de vez en cuando me llega un aroma a olvido, será que mi aroma es el mismo que la mochila?

El resto del día tranquilo Alex, aunque de nuevo me duele la cabeza, hoy espero dormir temprano, no me siento bien.

Alex… ven ya por mi… te lo suplico… no tardes… TE AMO.

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