8 de mayo de 2016

Las entradas

Me ha resultado extraño levantarme temprano en domingo, sobre todo haciéndolo sola en la casa y puedo decir que descanse un poco más con respecto a otros días, al menos no lo hice con la pierna del ahijado en la espalda, como acostumbra hacerlo. Sigo sin entender cómo es que teniendo tanto espacio en la cama siempre termina pegado a mí y haciendo que termine dormida en una orilla, lo mismo pasa con su mamá pero ella utiliza el sofá para recuperar un poco el sueño.

Lo primero que hice ha sido desayunar, luego levantar un poco la mesa, lavar los trastes y terminar aplastada en el sofá mirando televisión, luego he tomado mi Tablet y continúe enterándome del problema que se presentó ayer en la rolleada nocturna, y pensar que estuve a nada de ir.

A las 12 del día le mande un mensaje al tipo que conocí hace poco, el que intenta patinar con unos patines raros, pues son armados, nunca había visto algo así, pero bueno. Le he dicho como llegar a la pista de patinaje, el único problema con él es que tiene un olor muy particular, pero bueno, quien soy yo para discriminar.

A las 2 de la tarde ya estaba pasando por el pequeño y nos fuimos a la pista, como hacía mucho calor hemos tomado el primer camión que pasaba. Fuimos los primeros en llegar, apenas estaban haciendo la limpieza en la pista, saludamos a las personas que estaban ahí y esperamos a que terminaran.

Poco después de que terminaron llego esta persona, inmediatamente note los celos del niño, pero se tranquilizó al decirle que solo era alguien que quería patinar, creo que no le hizo mucha gracia, por suerte el saludo fue muy tranquilo y casi no estuve con él. Sobre todo el aroma, últimamente las alergias han hecho que tenga un olfato muy sensible Alex, y hay ciertos aromas que nada más no tolero, pero créeme que he tratado de ser lo más amable posible.

Lo chistoso es que cada vez que me sentaba y se acercaba esta persona, el niño venía inmediatamente a abrazarme, como correspondía a su abrazo se quedó más tranquilo, pero no desaprovechaba la oportunidad para preguntarme, constantemente, si era mi amigo, le he dicho que no, que solo era alguien más que quería aprender a patinar, y es cierto Alex.

Además al niño le han caído muy bien los otros rollers, sobre todo Oso y Alexis quienes le dieron algunos tips la vez que fuimos con ellos a un recorrido. Siempre que tiene oportunidad habla mucho de ellos, seguramente por como los vio patinando y como nos iban cuidando, sobre todo a él.

Lo más sobresaliente del día ha sido que al ir con la chica para pedir lo de siempre (una sopa instantánea y un hotdog con papas) nos ha dicho que iba a cobrarnos las entradas, que son 30 pesos por cada uno, cosa que hacía mucho no lo hacían y llegue a pensar que era porque les caíamos bien, al principio me molestó bastante, hasta el niño se sacó de onda y dijo que no nos cobraba y que era mucho dinero, pero bueno.

Al regresar hemos hablado de eso y hemos comentado algunas cosas, sobre todo que era un negocio y que de eso se mantenían, pero bueno, me ha quedado un mal sabor de boca, cuando pueda hablaré con Javier o mi antiguo maestro para saber si eso tiene solución o no, quizá ya sea el momento de buscar un nuevo lugar para ir a patinar.

Me siento muy cansada Alex, de nuevo me has hecho mucha falta, donde estás?, hace mucho que no sueño contigo.

Alex… ven ya por mí… TE AMO.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario