1 de abril de 2016

La hermana de la ratita

Hoy en el trabajo no ha pasado nada especial Alex, como Vic está aún de viaje, esta vez se ha ido directamente de sus vacaciones al proyecto de San Luis de la Paz, hemos estado un poco más relajados de lo normal.

Pero eso no quiere decir que he estado de floja, curiosamente me lo he pasado organizando y diseñando algunos reportes que me hacían falta, todo referente al sistema de calidad. Últimamente lo tenemos bastante olvidado, pero es que no puedo avanzar mucho si dependo de los demás, como en el proceso de Servicio donde César tiene la mano, debo esperarme a que me envíe la información para poder traducirla.

Por suerte he avanzado mucho, aunque me doy cuenta cuan detenido hemos tenido el sistema, seguramente es algo que se platicaremos el lunes, día que deberé llegar muy temprano a la oficina, una de las tantas cosas que no me gusta hacer Alex, ni hablar.

Después de la oficina hemos ido a comprar flores, esta vez han sido con otra persona, un señor que está muy cerca de donde venden fruta. He comprado moradas y blancas, colores de tu alma mater y astromelias para la Virgen de mamá, aunque no tenía tantas ganas de comprarle pues luego usan los floreros para tapar algunas veladoras y queman las flores.

Tanto en el recorrido de ida como de regreso hemos charlado acerca de la partida de la hermana de la ratita, no sé bien de que estaba enferma pero hoy finalmente ha partido, de alguna manera me hace sentir un poco mal pero por otra parte no es asunto mío Alex, sobre todo porque la ratita no me dijo algo cuando tu partiste, ni siquiera por compromiso.

Aunque tu mamá me estuvo preguntando mucho si le iba a dar algo, a lo que siempre respondí que no, ella por su parte dijo que le daría unos 200 pesos, cosa que a mí se me hace mal Alex, pues más que ayuda lo va a tomar mal, pero bueno, allá ella. Lo curioso ha sido que hasta Cecilia me ha dado la razón, aunque al final tu mamá decidirá si le da dinero o no.

Ya en la casa he pasado por el niño, pero me ha desilusionado al darme cuenta que esta vez no me estaba esperando, al llegar a su casa su mamá estaba lavando y él jugando con una niña que resulto ser nieta de una amiga de Blanca.

Tuve que esperar a que arreglara sus cosas para venirnos a la casa, por supuesto le he preguntado si quería quedarse, pero ha insistido en venir.

Al final del día, como todos los días, me has hecho mucha falta Alex.

Alex… ven ya por mi… no tardes… duele mucho estar sin ti… TE AMO.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario