9 de abril de 2016

Inculcando la lectura al ahijado

Desconozco el motivo por el cual me he despertado un poco temprano, eran poco más de las 9 de la mañana y ya estaba levantada, por suerte el niño me ha ayudado a comprar un poco de cloro para la casa mientras yo calentaba el desayuno.

Hemos desayunado los hot cakes que mamá me dio el domingo pasado, nos terminamos la leche y luego a lavar los platos, curiosamente siempre que el niño está en casa es lo que hacemos, si ensuciamos algún plato lo lavamos casi en seguida.

Toda la mañana he esperado al camión del agua, pero ha sido en vano, ni hablar Alex, deberé esperarlo el próximo miércoles, espero que el agua nos dure, con eso del calor terminamos bebiendo demasiado además con mi idea de no tomar refresco durante 1 mes pues me veo obligada al agua, más que nada de sabor frutales, hoy por ejemplo nos hemos acabado la de piña e hice de papaya.

Mientras esperaba el camión nos pusimos a recoger la casa, sacudir y trapear. Al termino nos acostamos un poco en la cama y terminamos mirando la película de Toroto, siento que el niño se apega mucho a nuestros gustos Alex, poco a poco quiero orientarle de la mejor manera, sobre todo porque su mamá no tiene mucha paciencia para hacerlo y quizá son temas que desconoce, en fin.

Ha quedado encantado con la película así que le he dicho que cada fin de semana veremos algo de anime, lo que se me hace extraño que saca algunas de tus manías sin pensarlo Alex, a veces me recuerda tanto a ti y siempre terminamos hablando de ti, me cuestiona mucho sobre tus gustos y como reaccionarias con algunos temas.

Por la tarde me armo de valor y nos vamos a patinar al camellón, solo que en el trayecto he tenido un pequeño accidente y tuvimos que volver a casa, de esos accidentes femeninos Alex, así que terminé por explicarle al niño lo que le sucede a una mujer, es curioso porque antes de irnos revisé bien y nada, pero bueno, mis cambios de humor y las circunstancias han hecho que tenga un periodo muy irregular. Termino limpiando y lavando la ropa para que no se manchara.

El resto de la tarde ha estado tranquilo, aunque me ha quedado la sensación de ir a patinar, pero la lluvia ha hecho que cambie los planes, así que cada quien se ha concentrado en sus asuntos, el niño jugando y yo me he puesto a leer.

Seguramente me vio muy concentrada y hasta riéndome por lo que leía que sin pensarlo se me acerco el ahijado a preguntarme que hacía, así que le dicho simplemente que leyendo, comenzamos a charlar y vi como su carita se ilumino, tratamos de buscar un libro acerca de Totoro pero no encontramos ninguno, así que le he bajado “El principito”, con ilustraciones y ambos nos pusimos a leer por una hora más o menos.

Solo que no sé cómo manejar su espíritu competitivo pues luego solo me decía: “Ya terminé otro capítulo”. Estoy segura que estando tú con nosotros sería mucho más fácil Alex. Momentos como estos son los que me hacen extrañarte en demasía pero me contuve en llorar, al menos ya solo lo hago cuando se ha ido a dormir o me encuentro sola.

Hay Alex, me haces tanta falta, ojalá pronto estemos juntos… TE AMO.

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