7 de marzo de 2016

Frenando con Osiris

Desde que me levanté he tenido tremenda pereza, quizá sea por lo cansada que terminé ayer o simplemente porque es Lunes, no lo sé bien Alex, pero casi no he avanzado en mis pendientes dentro de la oficina, eso incluye que ya debo estar pensando en generar un sistema para la empresa que apoye los procesos que estamos ya manejando.

Así que debo comenzar cuanto antes, aunque hoy no he tenido ni las ganas ni la concentración necesaria para hacerlo, he estado perdiendo el tiempo en otras cosas, entre ellas ponerme al corriente con el cambio de libreta, tratar de ponerte al día en lo que ha estado sucediendo de este lado y otras cosas más.

Por la tarde hemos tenido la reunión para analizar el impacto que tuvo la ventanita en cada uno de nosotros, comenzamos a decir lo más relevante y sobre todo lo que más nos pegó, en mi caso ha sido que varios detectaron una conducta un poco agresiva de mi parte, o deberé decir que más que poco. Sé muy bien que debo trabajar en ese aspecto y tratar de suavizar la forma en la que suelo contestar.

Posterior a eso analizamos la situación o más bien la experiencia que tuvimos con respecto a Enrique, algunos se enfocaron más en la parte negativa, de hecho yo hice algunos comentarios al respecto, pero también hable de lo positivo que me ha dejado trabajar con él. Luego hemos hecho una votación con respecto a enviarle o no nuestros comentarios, al final hemos decidido que sí, me ha sorprendido que algunos de mis comentarios hicieron cambiar de opinión a algunos de nosotros, incluyendo a Vic.

Luego me he venido a la casa, pase a saludar a tu mamá y ahí medio me dijo lo que hicieron el jueves pasado, han ido a buscar otro abogado pues el que usaban para desalojar a uno de sus inquilinos no les estaba dando resultados.

Después, ya en casa me he quedado de ver con Osiris para continuar las clases de patinaje, más que nada el frenado y algunas otras cosas más. He de decirte que estuve a punto de mandarlo a volar, pero me exigió demasiado, hubo un momento en el que hasta pena me ha dado pues invierte su tiempo en estar conmigo sin costo alguno, aunque creo que si se desesperó un poco con mis malos intentos de frenar en T, así que debo echarle muchas más ganas.

Creo que el practicar con Osiris me sirve mucho Alex, varias veces me ha dicho que debo salirme de mi zona de confort, que debo esforzarme mucho más y sobre todo no darme por vencida, quizá sea eso lo que necesito. Aunque me hizo sudar mucho me siento mejor, no sé cómo me haya visto pero estoy segura que en varias ocasiones noto que en verdad me duelen los pies. Sé que aprenderé mucho con él, le estaré eternamente agradecida, aunque me cueste mucho ganarme su amistad, es un chico que vale mucho la pena.

De ahí pase a la farmacia en busca de la cuponera que me comentó Margarita, pero no tuvieron disponibles, ni hablar Alex, creo que deberé comprar la medicina que me recomendó el doc para las alergias.

Al volver a casa he terminado llorando, no sé bien el motivo, quizá por sentirme sola, no se Alex, he sentido que era una olla de presión y las lágrimas han servido para aligerar un poco tantos sentimientos encontrados.

Una noche más que me haces falta.

Alex… ven ya por mi… te lo suplico… no tardes… TE AMO.

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