La ida al cine

Me he levantado con bastante miedo Alex, no tanto porque me fueran a espantar, más bien por la ida al cine que tenía planeada con Perla.

Ayer por la noche hemos ido al cine y compramos los boletos, ella no lo ha notado pero me ha costado bastante trabajo estar ahí, lugar donde volteara te buscaba desesperadamente, me costó mucho trabajo concentrarme y enfocarme en comprar los boletos, aunque finalmente solo he sacado el dinero y pague mi boleto, ni cuenta me di en los detalles.

Me he despertado alrededor de las 10 de la mañana, quizá un poco antes, desayune y me preparé mentalmente para no llorar en plena función. A las 11.15 de la mañana salí de casa y caminé hacia la calle de atrás, Perla ya iba saliendo y nos hemos puesto en camino, para mi mala suerte nos topamos con bastantes perros en el camino y eso me ha alterado más de lo que ya estaba.

No recuerdo bien lo que hemos hablado, pero han sido cosas triviales, más que nada sobre el pretendiente de Perla, un tal Ángel.

Y llegamos al cine, caminar los mismos pasillos que solíamos caminar Alex, comprar palomitas y seguir hacia la sala correspondiente me ha costado mucho, pero he disimulado para que Perla no me dijera nada o me viera con cara de lástima.

Nos hemos sentado hasta atrás, con la esperanza de que nada nos molestara, pues le comenté que tengo esa mala suerte, al menos siempre era lo mismo cuando íbamos al cine. Para no fallar paso lo mismo, una familia integrada por dos adultos y tres niños no paraban de hablar en toda la película, con decirte que hasta la mamá se la paso revisando sus redes sociales en su teléfono.

Por supuesto no era la única que persona que le molestaba eso, varias personas también hicieron el tradicional “Shhh” pero ellos ni se inmutaron. Traté de disfrutar la película y al parecer fui de las pocas personas que se rió con algunas menciones a las películas viejas.

Curiosamente el lugar a mi derecha estaba vacío, quiero imaginar que estabas tú ahí Alex, lo estuviste?

Confieso que se me ha escapado una que otra lagrimita en plena función, quizá Perla se haya dado cuenta, quizá no. Al final le he comentado que era la primera vez que iba al cine desde que tú te habías ido, esta vez ella no dijo nada al respecto.

Terminé acompañándola al super para que comprara algunas cosas, sobre todo comida para perros, de ahí cada quien a su casa a esperar las 3 para irnos a las flores.

Como siempre tu mamá ha tardado mucho en salir, hasta Perla se molestó pues no se le hace justo, en fin, fuimos y venimos sin problemas, te he puesto unas lindas flores amarillas con blancas, muy lindas, aunque casi nos agarra la lluvia pero hicimos todo lo planeado bien.

Hasta hemos ido a las tortas al pastor, solo que ahí he tenido un pequeño accidente con el periodo Alex, de la nada me ha bajado bastante, quise decirles pero me quedé callada. Al ir al baño noté todo lo que me había bajado y seguía haciéndolo. Maldita suerte.

Estuve todo el tiempo pensando en eso, hasta he omitido decir que mi torta llevaba queso, al pagar nos preguntaron pero yo seguía pensando en la mancha, finalmente Perla se ha regresado para pagar la diferencia, que era de 5 pesos. Pero me ha dado tiempo de sentar a tu mamá y poner algo en el asiento para no manchar de más.

Ya en casa he aprovechado para bañarme y lavar, además de desocupar algunas cosas, esta vez han sido libros, entre tuyos y míos, pero es que ya no tengo espacio Alex. Odio tener que hacer todo esto.

Por la noche, ya casi a media noche, he soltado todo lo que tenía dentro, entre frustración, enojo, coraje, tristeza… y mucho dolor convertido en lágrimas. Algún día cesarán Alex?

Alex… ven por mi… no tardes… TE AMO.