Un día lleno de emociones Alex, afortunadamente pude levantarme tarde, descanse bastante y desayune bien, pero por la tarde he andado bastante movida Alex, desde continuar ayudándole a tu mamá, hasta llevar a Andrea al médico y ayudar en la misa de todos santos, te explico.
Después de desayunar y vestirme lleve las paletas del doctor simi a Andrea, aunque muy en el fondo sabía, o más bien esperaba, que se las iban a dar a otra persona, se las di en mano a Cecilia cuando estaba en la tlapalería, luego he ido con la comadre para ver si el niño me acompaña a ir por tu torta de lengua, es lo que tenía planeado ponerte este año en la ofrenda, tanto con tu mamá como en la nuestra Alex.
Y si me acompañó, aunque tuvimos que hacer varias diligencias pues entre que íbamos por las tortas, se nos olvidaron las tortillas que Blanca nos pidió y fuimos por bolillos que tu mamá nos encargó al centro comercial se nos fue la tarde.
Además antes de comenzar todo esto, mientras pasaba a saludar a tu mamá a su casa, pude ver como seguía Andrea, para mi sorpresa me ha tratado como antes, así que seguí el mismo tenor Alex, antes de irnos la acompañé al médico, lo que hizo que nos retrasáramos bastante, luego de ahí con tu hermana para comprar panecitos pequeños en la panadería que tanto te gusta, lo bueno que solo la acompañamos a la tienda y de ahí nos fuimos por tu torta y tamales que nos encargó Cecilia para Andrea.
En correr y correr se nos pasaron las horas, además el niño quería regresarse antes de las 5 pues iría con su mamá al centro comercial a llevar a su perrita y pedir calaverita, la verdad no se ni para qué han ido, pero me dejaron sola con Blanca, quien me invitó un rico caldo de res, aunque solo me comí las verduras. Y de ahí a casa de tu mamá.
Les comenté todo lo que había pasado, sobre todo para que entendieran porque había llegado a esa hora, esta vez no ayude a preparar los bocadillos pero si a acomodar algunas cosas y continuar haciendo mandados.
Mientras hacia uno de los últimos mandados, vi cuando Xochitl y Tere salían de su casa disfrazadas, iban acompañadas de otro chico, la verdad se veían muy bien Alex, les tomé unas fotos de recuerdo y se marcharon a la calle de Madero, su mamá me invitó a ir con ellos por la noche, pero al final he declinado la invitación pues ya había quedado en ayudar a Cris con su trabajo de doctorado, ni hablar, quizá el otro año hasta me anime a disfrazarme, ya veremos Alex, aunque sinceramente lo dudo mucho.
Con decirte que hasta le puse una vela calientita al trasero de Andrea con la esperanza de que se le quitara un poco el dolor pues Cacho la ha estado inyectando, en teoría iba a hacerlo yo pero al final han decidido que fuese Cacho, ni hablar. Aunque creo que la ha inyectado mal pues donde me dijo que le dolía no corresponde a la zona donde se debe inyectar.
Y dieron las 8 de la noche, ya estábamos casi todos en la casa de tu mamá, este año ha sido poca familia, cuando llego el padre y comenzó la misa. Como siempre me agarra para ayudarle a escribir la lista de las personas que se han ido, los vivos, etc.
Lo que me ha sorprendido mucho es que el padre, después de darle a tu mamá de beber del cáliz, me lo ofreciera, un gesto que ningún otro sacerdote había tenido conmigo, ni siquiera en mi primera comunión, aunque también tuvo el mismo gesto con tu hermana.
Y volví a casa poco después de las 10 de la noche, apurada pero te he puesto una pequeña ofrenda con cosas que sé que te gusta Alex, espero que mañana, cuando te toca venir, te guste lo que he puesto para ti (tu torta de lengua, tu tarro con café y leche, un poco de licor, dulces, pan, etc.)
Ahora a continuar con lo de Cris, espero no tardarme mucho, mañana es domingo y deberé levantarme temprano, me siento tan cansada Alex.
Alex… te extraño tanto… ven ya por mi… no tardes… TE AMO.
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