Completamente enojada

Pensé que hoy sería un día tranquilo, o más bien como cualquier domingo, hice lo habitual Alex, desde llevar a tu mamá a misa, luego a comprar un poco de fruta mientras ella hace su mandado, de ahí a casa de mamá para desayunar y hacer unas cuantas compras.

Como siempre, termino con más bolsas de regreso que de ida, pero hemos ido a la tienda y, mientras no iba a comprar gran cosa, terminé con medio cochecito lleno y mamá con otro tanto. Ha sido de regreso cuando le comenté que sería bueno quedarnos de ver con el ex esposo de Carmen, por supuesto le dije que solo desayuno y además ver que tanto le hizo ella, pero ahí quedó, no le di más importancia de la necesaria.

De ahí a casa, comenzar a lavar y dejar todo listo para iniciar una semana laboral, eso fue lo que pensé Alex, hasta que dieron las 5 de la tarde y mamá me llamó para decirme que casi iban llegando al Vips de la casa, le pregunté con quien venía y adivina, así es, venía en el coche del ex esposo de Carmen, el dichoso Carlos.

Por supuesto la primer imagen que se me cruzó por la mente ha sido la tuya completamente molesto y enojado, lo que me hizo ponerme más enojada de lo normal, lo único que pude pensar era en tu reacción Alex, en lo que paso la última vez que lo vi y sobre todo en lo que me dirías.

Estoy 100% segura que te habrías enojado, dirías que mamá está loca por llevar a ese tipo cerca de la casa después de la forma en la que nos tratamos la última vez.

Por supuesto le dije que se fuera al otro restaurante, en la otra plaza, me puse mi pantalón azul y una chamarra, camine y pensé en todo lo que le diría a mamá, mientras más me acercaba al lugar más me enojaba.

Cuando llegué vi a mamá sentada, con cara de espantada, seguramente mi cara dijo más que mil palabras, por supuesto le reclamé, como era posible que lo llevara cerca de la casa sí apenas hoy le había planteado la posibilidad, más no había accedido del todo, como se le había ocurrido ir sin avisar antes, como se le ocurrió sacarme de la casa a esa hora cuando ya está oscureciendo, como no pensó en que me metería en problemas con tu mamá si se llega a enterar y sobre todo como no pensó en los problemas que eso me llevaría, el que decidiera por mí es algo que no tolero, no en ella Alex.

Hizo su cara de sufrimiento, me respondió que no lo había pensado. Sobre todo el hecho de que no quiero tener a la loca de Carmen cerca de casa para que me meta en problemas, yo desconfió de todo Alex y ese señor no es la excepción.

Cómo habrá estado mi cara que hasta la mesera trato de bromear con eso pero como no respondimos prefirió irse. La gota que derramó el vaso fue cuando llegó Carlos, le dije que no era la mejor manera de llegar, argumentó que me quería ver y darme el pésame por tu partida.

Ahí fue cuando golpee la mesa, dije: “ya me voy, hasta luego” y sin mirar atrás salí del restaurante hecha una furia, no me despedí de nadie, solo salí lo más rápido que pude.

Caminé a la tienda, compre unas botellas y volví caminando a casa, esperé no encontrarme a nadie conocido por la calle, tal parece que todos salieron a recibirme, y entre a casa, espero que no le cuenten a tu mamá que me vieron afuera de la casa, me meteré en un gran problema.

La poca paciencia que le tengo a mamá se agotó en segundos, como es posible que se le ocurra estar contando cosas personales, habrá que ver como reacciono después con ella Alex, por ahora estoy que me lleva el tren.

No puedo creer el grado de indiscreción que mamá ha cometido hoy, ve tú a saber que más ha contado y sobre todo a quien. La última vez que lo hizo le dije que en ese momento se olvidara de mí, ya no se ni que pensar Alex.

Tiempo después mamá llamo para avisarme que estaba en su casa, le colgué, luego que se iba a dormir, le volví a colgar, por ahora no quiero saber nada de ella, ni de nadie más. Maldita sea Alex, todo está mal, TODO.

Alex… ven por mí… TE AMO.