Los negritos de Cuba

Vaya sorpresa me he llevado, en mi escritorio me he topado con un par de negritos, una mujer y hombre, ambos tocando unos tambores, muy pero muy lindos Alex, regalo de Enrique, traídos desde Cuba.

He brincado de alegría, agradecí el detalle con un beso y un abrazo, hace mucho que nadie me sorprendía de esta forma Alex, eras tú quien siempre me traías cosas de tus viajes, por pequeño que fuese.

Tan lindos son que hasta la señora de la limpieza me los ha chuleado, quise decir lo que siempre decía en este caso: “Alguien que me quiere mucho me los ha traído”, pero alcancé a morderme la lengua y tragarme las lágrimas con un sorbo a mi café.

Me he dado cuenta que solo a mí me ha traído negritos, a los demás fueron cochecitos de diferentes modelos, Vic lo puso sobre su monitor, Pedro lo ha dejado en su escritorio al igual que Omar, este último porque si se lo lleva a su casa sus hijos lo destruirán por completo, al menos eso me ha dicho.

Pero los lindos son los míos, Enrique dijo que como Vic le encargo me trajera un negro por eso lo escogió, pero que no lo quería dejar solo y le gustó más la pareja para mí, por supuesto he pensado en mi querido Negrito, tu Alex, café con leche, así éramos Alex, en tus palabras, y ahora solo queda la leche con poco de café.

No tienes idea de cuánto te extraño Alex. Ojalá pronto estemos juntos, aunque eso le cause un tremendo dolor a mamá, sé que solo ella me echará de menos como yo a ti.

El resto del día ha estado tranquilo, cuando volví a casa pase a ver a tu mamá y fue Cecilia quien me pregunto que traía en la bolsa, le mostré los negritos y terminamos hablando del viaje que Victor hizo a Cuba y ahora como lo cuestionan cuando va a USA.

Tan lindos están mis negritos que hasta a tu mamá le gustaron, creo que tenía ganas de pedírmelos, pero no se los voy a dar, finalmente es un lindo regalo.

Cuando hable con mamá se los he presumido también, me dice ella que son de buena suerte, siempre y cuando te los regalen, con esos ya tengo los músicos y la negrita que me regalo tu mamá hecha de mecate.

Te gustan a ti también?, seguro que si Alex.

Alex… ven ya por mi… no tardes… te lo suplico… TE AMO.