Y de nuevo nos hemos ido a Puebla, hoy solo procuré llegar temprano pero se me hizo un poco tarde, le mande un mensaje a Vic avisándole aunque al final llegue 10 minutos tarde, cuando llegue ya estaban cargando lo que llevaríamos. No ha sido mucho equipo, solo el servidor, computadoras personales y cosas personales.
El camino ha sido largo, para no variar Enrique se ha ido dormido en la parte de atrás, en resumida cuenta solo ha hecho eso Alex, Vic y yo hemos habado de cosas triviales de camino, como lo lindo que se veían los volcanes y cosas así.
Cuando llegamos a la planta todo ha estado tranquilo hasta que comenzamos a hacer algunas pruebas Enrique y yo, con decirte que la cosa subió de temperatura y hemos discutido mucho, todo enfrente de Vic. Una de ellas fue cuando estaba preguntándole algo y sin más ni menos Enrique se levantó y se fue a ver no sé qué cosas, acción que me ha molestado mucho.
Otro momento incomodo ha sido cuando su frase: “Entiéndeme” me ha hecho enojar, por supuesto yo respondí con la de: “Haber Enrique”. Llegó un momento en el cual le dije: “Dame un momento en lo que ordeno mis ideas y se me baja lo molesta”, me puse los audífonos y me concentré en lo que tenía que hacer.
Al final, cuando todo estuvo más tranquilo pudimos avanzar y solucionar muchas cosas, justo cuando Enrique se fue al baño Vic me dijo que parecíamos el grupo Pimpinela, lo que me hizo reír un poco y pensé que hablaríamos un poco más al respecto, sobre todo por la actitud que usualmente toma Enrique. En fin, creo que llegará el momento en el cual hablará con todos, incluyéndolo y deberá tomar alguna acción, como dijeras: Para bien o para mal.
Solo hemos comido y nos regresamos, la verdad es que yo tenía mucha prisa pues no le había avisado a tu mamá y mucho menos le dije a mamá que se fuera a quedar a la casa para que la cuidara.
Y llegamos bien, solo que esta vez no llegamos a la oficina, Vic nos ha dejado en el metro Pantitlán, donde sinceramente me ha dado un poco de miedo bajar, una estación bastante complicada, pero bueno. Enrique se disfrazó de maleante, es decir se quedó vestido con su overol azul y se puso su gorrita de chafierete, casi me da risa cuando lo vi pero preferí guardar silencio.
Y llegamos a la línea que a mí me convenía, la amarilla, me he bajado en Eduardo Molina y de ahí en metro bus a la casa, he llegado en 30 minutos más o menos. Una hora después Vic me manda mensaje para preguntarme si había llegado bien, creo que también se ha preocupado por mí pues según él me queje mucho por habernos dejado ahí.
Por supuesto te he extrañado todo el tiempo Alex.
En la maleta se ha ido el coquito conmigo. Como siempre duermo con él, no sé qué haría sin coquito a mi lado.
Alex… ven por mi… no tardes… te lo suplico… ya no quiero estar aquí… VEN YA… TE AMO.
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