Tratando de programar

He comenzado el día un poco cansada, aunque no es extraño ya en mi Alex, además hoy es el último día que pasaré relajada, por así llamarlo, mañana comienzan las clases en el Cenlex.

Afortunadamente llegue sin problemas a la oficina, comencé a realizar las actividades de siempre y alrededor de las 11 del día llego Pedro, lo bueno es que yo me mantuve ocupada tratando de programar, he estado investigando un poco, creo que voy por buen camino pero realizar programas sin la orientación de alguien me resulta difícil, aunque no creo que sea exactamente eso Alex.

Cada vez que programo te recuerdo mucho, aunque no solo con esa actividad, la vez que hice el mini sistema para unos clientes, tanto tu como Vic se mostraron sorprendidos, sobre todo tu, estabas tan emocionado, orgulloso y apenado conmigo, varias veces me pediste que te enseñara a programar para que me ayudaras, como no pude hacerlo en ese momento te quedaste conmigo hasta que el sistema estuvo terminado.

Ya ni recuerdo a qué hora de la madrugada nos fuimos a dormir, pero me diste un hermoso beso que aun siento en mis labios. Como extraño eso Alex.

Y me he regresado temprano a la casa, pasé a saludar a tu mamá y me vine a la casa, estoy comiendo mejor Alex, pero siempre es comida atrasada de la que mamá me hace, algún día volveré a cocinar?

He de decirte que los programas de Friends comienzan a aburrirme, cosas que me gustaban y disfrutaba hacer ahora me resultan tan vacías, tan huecas y cuando las hago me aburren muchísimo, sigo pensando en la opción de volver al Aikido, aunque haya tenido una mala experiencia con el Sensei principal.

Las noches siguen estando muy frías, debo de poner el cojín térmico dos veces en el microondas para que al dormir siga calientito, la primera vez me sirve para quitarle lo frío a los pies, calentar las cobijas y algunas otras partes del cuerpo, pero la segunda vez es para ya dormir.

Seguramente no disfrutarías tanto estos días, en lo personal los prefiero aunque la alergia comience a manifestarse nuevamente y me dificulte respirar.

Extraño tanto tus mimos Alex, hasta tus reclamos son ahora tan añorados, a veces me sorprendo dejando uno que otro frasco abierto para engañar al corazón e imaginar que en cualquier momento puedas entrar por la puerta, tanto es lo que te extraño.

Alex… ven ya por mi… no tardes… te lo ruego… ven ya… TE AMO.