23 de diciembre de 2013

Volviendo a casa

Desde ayer tengo lista la maleta, solo hoy he sacado lo que voy a tirar, el champo y enjuague, el spray para el cabello y un desodorante ya casi a punto de terminar, creo que ha sido lo mejor Alex, llevar piedras al monte no sería bueno. Y estoy segura que tu habrías hecho lo mismo Alex, seguramente si, aunque me sobraba un poco de cada cosa, no mucho Alex, quizá hubiera servido para un baño más.

En fin, de nuevo la primera en bajar, revise varias veces el cuarto antes de salir, una mirada debajo de cada cama, el baño, el tocador, la cama… uff, las cosas que solías hacer tu Alex, antes de cerrar la puerta he tomado una foto para recordad la primera vez que estoy en un hotel sin ti Alex, cuantas primeras veces llevo?

El ultimo licuado de papaya que beberé, mientras esperaba el desayuno comenzaron a bajar los demás. Mientras Vic finiquitaba la cuenta nos hemos puesto a acomodar las cosas, no sé en qué momento llego Vic y comenzó a barrer el interior de la camioneta, ahora hemos sido él y yo los que viajamos en la parte trasera, he de decirte que es bastante incomodo Alex.

Ya con las maletas y todo nos pusimos en camino, es curioso Alex, pero gran parte del trayecto me la he pasado dormida, aunque de vez en cuando despertaba por algo y entre una cosa y otra Vic me dijo que es necesario tome algunos cursos pues tiene planeado mandarme con Pedro a USA para capacitarme con el sistema, piensa explotarlo más y necesita que me involucre más.

Ese comentario me hizo pensar mucho, tantas cosas que desconozco y de las cuales quedaste en enseñarme, ahora estoy temerosa, con muchas dudas y sin saber que hacer Alex, porque tenias que haberte ido?

Pedro ha hecho algunos comentarios, sobre todo uno en el cual me hizo sentir incomoda, si estoy subida de peso que más da?, a mi no me interesa, a ti no te importó Alex, así que preferiría que me dejara en paz, a veces me cae muy bien, otras lo odio. Pero bueno Alex, al menos he de liar con una sola persona, en cambio en los otros trabajos eran varios.

Y llegamos por la tarde al famoso cafecito, comimos y fue ahí donde compre algo para mi mamá y tu mamá, rompope de nuez de macadamia, más que nada lo he hecho pensando en que tu mamá siempre me trae algo vaya a donde vaya, además de dos frascos de mermelada y un licor para mí que supuestamente es bueno para los ciclos menstruales, servirá de algo Alex?

Y desde ese punto hemos cambiado de lugar, ahora ha sido Vic quien manejaba y pude relajar un poco las rodillas, en el trayecto hemos parado para tapar las maletas pues al entrar a la Ciudad de México estaba lloviendo, como traíamos equipo Vic no se quiso arriesgar, pero no teníamos bolsas suficientes, al final una de ellas salió volando, cosa que nos hizo reír un poco, además del hecho que Pedro trato de comprar una de mis botellas de rompope Alex, se la quería regalar a su novia, pero no le he vendido ni una, una pequeña venganza por sus comentarios sarcásticos.

Pasamos a dejar primero al Hermanote a su casa, luego a la oficina y de ahí me ha traído a casa, Pedro se ha ido en su coche y por un minuto llegue a pensar en cómo me regresaría a casa, lo bueno es que Vic me ha dado un aventón a casa aunque uno de mis atajos no fue muy bueno, ha sido ahí donde me dio pena pues ya estábamos todos cansados.

Llegue a casa, salude a mamá, hable con la tuya y cene un poco para luego prepararme para ir a dormir, tantas emociones Alex, pero no han sido suficientes para contrarrestar el dolor, duele mucho estar sin ti.

Lo primero que he hecho es sacar a coquito y ponerlo en la cama, sería lo último que me faltara, perderlo, creo que me volvería loca si eso pasara. No pasará, no en esta “vida”.

Me voy a la cama con la promesa de una invitación para el 24 en casa de Vic, muy cansada y miles de lágrimas a punto de salir.

Alex… ven por mi… no tardes… te lo ruego… ven ya… TE AMO.

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