La anécdota

Hoy ha venido a casa mi mamá, mañana iremos al pueblo que tanto le gusta a tu mamá Alex. Sentí un poco feo decirle que se viniera en metro, sobre todo porque me cuenta ha estado muy incómoda de los ojos por un estudio que le han hecho. Al principio no quería venir pero al final accedió, se que le hará bien salir un poco de su rutina, no solo a ella, a todas.

He ido por ella, fuimos y venimos de su casa sin problemas, creo que le ha gustado el detalle de que fuera a su casa y no venirse sola. Pero le cuento que hago varias cosas por tu mamá Alex que se me hace injusto no tener detalles con ella.

Al ir le he llevado las bolsas de leche, un gasto menos para ella. Una obligación mas para mí, será esto bueno?

Por la tarde hemos ido al panteón juntas, pensé que se la pasarían hablando de los análisis que le han hecho a mi mamá Alex, pero la plática ha sido tan común que preferí guardar silencio por largos trayectos.

Limpie las flores, las coloque en el florero lo mejor que pude, repartí las viejas. Tu hermana ya llevaba casi todas limpias así que solo han cortado los tallos. Fue curioso como tu mamá le presumía el boche de rosarios que llevaba, ha sido mi mamá quien escogió el que colocaron con tu Tía Tere Alex.

El regreso ha sido cuando me “movieron el tapete” Alex, Cecilia iba contando algunas anécdotas sobre los lugares que íbamos recorriendo, hemos pasado a una nevería para que comprara yogurt, muy cerca de los caldos de gallina. Ha sido la siguiente historia la que casi me hace llorar:

“Y en este local venden caldos de gallina, aquí veníamos con mi hermano cuando nos llevaba al panteón pero varias veces nos trajo corriendo pues cuando hablaba con su hija comenzaba a apresurarnos para volver a casa, varias veces no comía, una vez hasta se le cayó el plato con las enchiladas en mi falda, no te apures hermano ya nos vamos. Estaba ansioso por llegar con su hija señora Carmen, tanto así la quería”.

Casi me pongo a llorar cuando termino de contarla, ni siquiera recuerdo lo que he dicho, solo imágenes tuyas vinieron a mi mente, te imagine vestido de pans, con una felpa y ansioso por verme.

Ha sido cuando mamá se ha ido a dormir que pude llorar, también TE AMO ALEX, así o más, mírame, sigo en el mismo lugar en espera de que vengas por mí.

Alex… ven ya… TE AMO.