Reflujo

Era casi las 3 de la mañana y aun no lograba conciliar el sueño Alex, hice de todo para conseguirlo y no pude. Llego el momento en el que mejor apague todo y me recosté pensando en tantas cosas y me quede dormida, no sé cuánto tiempo estuve así pero de repente me desperté con un terrible reflujo, me ardía la garganta y tenía un mal sabor de boca. De un brinco me levante de la cama, comí un poco de manzana, bebí leche y no sé qué tantas cosas. Hice de todo pero el ardor no se quitaba mucho menos el dolor.

Después de un rato me lave los dientes y comí un poco de la pasta para los dientes, solo así pude aminorar el dolor y el sabor que el reflujo había dejado. Sin pensarlo me quede dormida pero antes de eso pude darme cuenta que ya comenzaba a amanecer, afortunadamente mañana es feriado y podre quedarme en casa.

Me levante bastante tarde, tu mamá hizo venir hoy al trabajador, escuche como doblaba los anillos. Al parecer hoy no ha hecho mucho calor, o no me he dado cuenta de ello Alex, pero me siento un poco más tranquila pues solo me queda un poco de ardor en la garganta.

Todo el día me la he pasado escondida del mundo, ayer pensaba en ir hoy a las librerías de viejo y buscar algún libro de Anne Rice, pero me levante tan tarde y sin ganas de hacer algo “especial”, quizá otro día. Hoy no.

He comido un poco, teniendo cuidado de no lastimarme más la garganta, me siento tan cansada Alex. Creo que debo de retomar el hábito de tomar pastillas para dormir, quizá con eso logre conciliar el sueño más temprano. Quizá pueda descansar un poco más.

Las risas afuera de la casa comienzan a molestarme tanto, pero ni siquiera para eso puedo juntar fuerzas y correr a los niños, ojala se fueran a jugar a otra parte. O mejor aun Alex, ojala ya no estuviera aquí.

Alex… mi Alex… por favor no tardes en venir por mi… duele tanto estar sin ti… duele tanto… TE AMO.