El temblor y los anillos

Desperté sin planearlo temprano Alex, me vestí y mire un poco los programas de la televisión antes de irme al Cenlex. Pensaba en desayunar algo, quizá estar de la mejor manera y tomar las dos clases.

Y comenzó a moverse todo, por un segundo pensé en que estaba mareada hasta que mire tu gafete, vi como se movía de un lado hacia el otro y camine hacia la puerta. Mientras lo hacía trate de comunicarme con mi mamá pero no pude Alex. Cuando el trabajador de tu mamá me vio grito: Esta temblando. Solo pude afirmar lo escuchado moviendo la cabeza, la gente de las otras casas salieron preocupadas.

Parece que duro 1 hora, los segundos se hicieron horas. Y paso el temblor, nuevamente trate de hablar con mi mamá pero ya no había luz eléctrica ni líneas telefónicas. Tome mis cosas y fui hacia la casa de tu mamá Alex, afortunadamente están bien pero tampoco pudieron comunicarse con los Díaz.

Al llegar al Cenlex había mucha conmoción, por supuesto el tema de todas las charlas era el temblor. Que si había sido oscilatorio, que si no. Sinceramente no preste atención a nada Alex, solo quería distraerme tomando clases. Lo malo fue que cerraron el edificio y nos pidieron retirarnos del lugar, vi como los maestros salían con sus cosas y se despedían de sus alumnos.

Me despedí de un compañero y me vine a la casa Alex, por supuesto intente varias veces hablar con mi mamá, fue después de las 5 cuando llego la luz y pude hacerlo. Estaba muy preocupada pues todos sus hermanos habían hablado ya con ella, menos yo. Al parecer solo ha sido el susto Alex, todos estamos bien, relativamente. Ahora solo habrá que esperar las replicas.

He tenido en mis manos los anillos de tus papás Alex, he llorado bastante pues se que debo devolvérselos pero por más que intento viene a mi esa promesa de cuidarlos. He tratado de ponerme en tus zapatos y estoy segura que tú se los habrías devuelto si tu mamá te los hubiera pedido. Trate de ponerme en los zapatos de tú mamá y sé que para ella son mucho más importantes que para mí. 50 años de matrimonio se dicen fáciles pero no son así.

Baje con ellos entre mis manos, y ha sido un detalle el que me hizo tomar la decisión de llevárselos, el de tu mamá se me escapo entre las manos, Alex lo he tomado como una señal de tu parte, no me pertenecen Alex, ni por la promesa que te hice de cuidarlos. Abrí la puerta y fui a su casa.

Estaban en la cocina comiendo algo, le hice una señal a tu mamá y nos fuimos a la capilla, Cecilia iba tras de nosotras pensando que algo malo había pasado, pero cuando le coloque los anillos a tu mamá en sus manos fue que nos dejo solas. Le he dio que apenas los encontré y que ahí los tenia. Amas hemos llorado tanto.

Después de tranquilizarme volví a la casa, fue cuando cerré la puerta que me he desmoronado, he llorado tanto. Sentí tanto dolor que le llame a mi mamá y le dije lo que había hecho, ella me ha dicho que hice bien, que tú no te enojarías conmigo por hacerlo y que espera de esa forma dejen de presionarme. Hay Alex.

Perdona me Alex… te suplico me perdones, ya no puedo cuidarlos como me pediste. Se los he entregado a tu mamá… por favor perdóname. No sé si he roto la promesa o la he cumplido fielmente, no lo sé Alex… por favor perdóname. PERDÓNAME ALEX.

Alex… ven por mi… te lo suplico… TE AMO.