24 de enero de 2012

Los cuadernos

Me desperté mucho antes de que sonara la alarma del despertador Alex, lo malo fue que aunque me obligue a dormir de nuevo no pude lograrlo, mucho menos soñar contigo. Lo curioso es que recuerdo parte de mis sueños en los cuales me vi en un cuarto bastante deteriorado, había muchas cosas amontonadas y al comenzar a llover tenia muchísimas goteras, al parecer me iba a cambiar pero estaba sangrando, me quitaba gasas llenas de sangre que estaba alrededor de mi cuerpo, alguien me esperaba Alex, pero cuando veía quien era despertaba, no recuerdo quien era.

Parece que ahora mi subconsciente trata de compensar los relatos de tus locos y extraños sueños con sueños locos y extraños en donde yo soy la protagonista. Aunque me gustaba más cuando tú me los contabas pues hacías sonidos, movimientos y a veces hasta los actuabas Alex, recuerdas?

A las 12.30 salí de la casa y me fui a tomar clases, esta vez decidí tomar otro camino pero me perdí, ni siquiera las indicaciones del policía pudieron ayudarme, por un momento me desesperé ya que se acercaba la hora de entrada y no quería llegar tarde, poco falto para soltarme a llorar Alex, si estuvieras a mi lado esto jamás me pasaría…. Qué triste.

En la primera clase me senté cerca de la ventana, justo como hacía cuando estudiaba la universidad Alex, como lo hice ayer, constantemente miraba el árbol en el que te imagine, sentado, acostado, apoyado… tantas y tantas posiciones, pero sobre todo de vez en cuando saludándome y tratando de arrancarme sonrisas y hacerme desconcentrar. Por momentos quise llorar, pero me contuve bastante. He pensado en comprar el libro, aunque no me emociona hacerlo Alex, esperaré unos días para ver si los demás logran sacar copias, ojalá también pueda hacerlo yo.

La segunda hora pasó más rápido, como el maestro no pronuncia muy bien el español hay que ponerle atención para no perder el hilo de la clase Alex. Hoy el sensei llego con el zipper del pantalón abajo y nadie se animaba a decirle, así que junte fuerzas y le comente, todos comenzaron a reír. Pensé que se apenaría mucho pero hizo una pequeña broma y continúo dando clases.

Regresé a casa y comí un poco, pero no me gusto la comida por lo que comí poco y dedique toda la tarde en buscar libros que me ayuden con el japonés, al parecer encontré el libro que el sensei va a usar, lo busque en una librería y sale caro, creo que será mejor imprimir los archivos que baje Alex.

Desde ayer llevaba una pequeña libreta para tomar apuntes, pero creo que lo mejor es llevar cuadernos profesionales e independientes, me fui al centro comercial para buscar algunos y los encontré después de buscar entre tantos cuadernos, de hecho fui a otra tienda, ese hecho me ha puesto tan triste Alex que regrese a casa llorando. Si tú estuvieras a mi lado como antes, sería tan gozoso este momento, sé que me comprarías hermosos cuadernos, iríamos en busca de los libros y al salir de clases te contaría lo aprendido Alex, seguro me ayudarías con el inglés aunque me molestaría constantemente contigo por hacerme repelar con la pronunciación.

Hay Alex… tantas cosas que pasarían…. Tantas alegrías, risas, momentos…. Tanto amor…

Alex… estoy sufriendo… por favor… no me dejes mas aquí… te lo suplico… me siento tan sola… por favor ven ya por mi…. te extraño…. TE AMO.

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