5 de agosto de 2011

La fruta

Las 9 de la mañana eran cuando me levante de la cama, di como 3 vueltas a la casa y regrese a la cama Alex, a veces pienso para que levantarme de ella si no vale la pena.

Eran como las 2 de la tarde cuando me serví de comer, un poco solamente. Mamá llego después de las 5 de la tarde, al principio me había preocupado pues desde las 4 irían por ella. Me senté a esperarla en las escaleras. Llego y ayude a acomodar la comida que trajo, todo se ve bien. Veamos qué tanta hambre llego a tener en la semana.

Comenzó a llover Alex, al ver que el trabajador no había tapado nada del material, y correspondiendo las atenciones de tu mamá, baje y tape todo, no creo que de la mejor manera pero al menos ya no corría peligro de que se mojara el material. Recordé las veces que te ayude a hacerlo, pero una cosa es ayudar y otra hacerlo sola.

Minutos después llego tu mamá toda apurada, pero no dijo nada respecto a mi mal forma de tapar las cosas, mi mamá le dijo que yo lo había hecho pero permaneció en silencio. Lo que si es que nos ha reclamado el que casi no estamos en la casa y que tenemos todo oscuro cosa que no es cierto, en fin… nunca se le da agrado a ella Alex, ni tu siendo su hijo podías con ella, mucho menos yo ahora.

Fuimos a las flores, ahora ellas compraron bastantes creo que después del comentario de mi mamá en el cual les dijo que yo te ponía flores en la casa, ella también comenzó a hacerlo, no lo sé.

Al llegar al mercado vimos al señor que vende mangos, pensando que traería fuimos a verlo pero ya no lleva, argumentando que la temporada del buen mango ya termino. En cambio nos dio una probada de Tunas y Melón, por supuesto yo me resistí pero el señor insistió y no pude rechazarlo de ninguna forma. Al comer la tuna me puse muy triste, hermosos recuerdos me llegaron de repente, moldes llenos de tunas con limón y chile piquín en una tarde de películas… recuerdas Alex?... como extraño esas tardes.

Ni que decir del melón, no puedo siquiera expresar la tristeza que me dio al comerlo. A cada mordida pensaba en ti Alex… Habrás estado a mi lado?

De regreso, al quedarme a solas con tu madre nuevamente me dijo algunos malos comentarios, pero como no respondí de la forma que ella esperaba creo que fueron más dolorosos para ella que para mí, se quedo callada casi todo el camino de regreso.

Ya no sé si soy fuerte, conformista o masoquista. Hoy he llorado bastante, aunque es mas a solas que nada.

Te extraño mucho Alex, me duele mucho tu ausencia… por favor… ven ya por mi… duele mucho… TE AMO.

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