26 de agosto de 2011

La escoba

Despertar desde las 7 am y posteriormente en lapsos de 2 horas o menos no tiene precio, sobre todo Alex porque aunque no quiera en las noches sigo despertándome constantemente, solo que después de las 7 am tarde para dormir un poco más.

Los queridos vecinos siguen poniendo música, solo que ahora fue del genero electrónico, sumando con ello que al parecer fumaron dando como resultado la incorporación inmediata de la cama y sobre todo un mal sabor de boca, espero que no me lastime la garganta y comience de nuevo con tos Alex.

Barrí la casa y lave los trastos, esta semana la ratita no ha venido a limpiar la casa, como decías: “tendrá más trabajo la siguiente semana”. La casa no esta tan sucia, así que no se nota mucho Alex.

Mi mamá llego a las 4, desafortunadamente no llamo antes de venir y eso me incomodo bastante, espero que la forma en la que se lo he dicho no la moleste. He comido un poco, sobre todo verduras, sigue dándome un poco de asco pero me lo aguanto y trato de terminar el plato, aunque sigue siendo pequeño.

Tu mamá sí que se ha molestado con el machetero, lo ha regañado bastante, aunque a veces la forma de decir las cosas de ella es muy golpeado.

Espero que hoy no llueva como en días pasados, me hace sentir bastante triste, tormentas con truenos, granizo y bastante lluvia, como la que solíamos disfrutar bajo las cobijas viendo una película y cuando se iba la luz charlando de mil cosas, extraño mucho eso Alex, te extraño mucho.

Tu mamá ha comprado bastante flor, mucha de la cual se la llevara a una vecina: “Mona”, sinceramente Alex no recuerdo quien sea, seguramente de vista la llegamos a ver muchas veces. Las dejé en su casa y de regreso escuche como estaban acomodando la flor por lo que fui y les ayude, al final terminamos limpiando la flor y arreglándola en un gran ramo que envolví con celofán. Cecilia saco un florero y se las llevamos. Sinceramente no tenía ganas de ir, al final de cuentas es gente que no conocemos aunque no podía dejarlas ir solas, fui con ellas y trate de no pensar en el lugar y sobre todo lo que estaba pasando a mí alrededor.

Son situaciones en las que estoy segura tu no permitirías que fueran solas. Por tal motivo no pude dejar que se fueran solas. De regreso me dejaron en la casa.

Dicen que cuando muere una persona en esa misma cuadra o zona se van 2 mas, al final el dicho popular es: “siempre se van tres”. Sabes, solo espero que una de las dos personas que falten sea yo, ya no quiero estar aquí.

Te extraño muchísimo Alex… ya nada vale la pena si no estás a mi lado, aunque hoy pude corroborar que siempre estas junto a mí, gracias por recordarme donde están las escobas en casa de tu mamá, trate de dejar todo limpio.

Alex, por favor… te lo suplico… ven ya por mi… no me dejes aquí… por favor… ven ya…. TE AMO.

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