Aun y cuando me estuve despertando continuamente por la mañana, logre levantarme hasta la 1 de la tarde Alex. No encuentro motivos o razones suficientes para hacerlo antes de esa hora.
Sigo escondiéndome del mundo, de la felicidad ajena, de las risas, de las manos entrelazadas, de los besos de amor entre parejas, de bebes riendo… de la “vida”. Cada vez que salgo me duele, envidio la gente que es “feliz”, me duele mucho Alex.
Veo una y otra y otra vez los mismos programas gastados, las mismas películas de siempre. Alex, cómo pudiste pasar tanto tiempo en cama sin volverte loco?, creo que ansiabas la hora en la que llegaba del trabajo, entre risas y charlas era tu hora feliz… como extraño eso.
Lo único memorable que hecho en el día es comer un poco más, aunque eso me ocasione dolor de estomago, y no tratar de quitarme la “vida”, aunque lo he pensado constantemente en el día.
Por la tarde ha comenzado a llover terriblemente, la arena de tu mamá se ha visto un poco disminuida, pero pues no quiere cerrar. Luego comenzaron los rayos, truenos y se ha ido la luz en repetidas ocasiones. Recordé las veces que pasaba lo mismo, pero esas veces Alex tu siempre dijiste que te gustaba estar así, con lluvia en la casa pero sobre todo a mi lado. Muchas de esas veces terminábamos abrazados. Hoy… por más que lo dije… nadie me abrazo… sin embargo me sentí muy sola y triste. Por un momento llegue a pensar en salir y sentarme a medio patio, cerca de la arena… quizá de esa forma pudiera desaparecer junto con ella.
Llovió bastante Alex. La ciudad esta vuelta un caos. Aunque nada se asemeja a la forma en la que me encuentro.
Si pudiera desaparecer, cruzar la puerta y estar en el mismo lugar en donde ahora te encuentras Alex… si pudiera…
TE AMO Alex… mi amado esposo… te amo tanto…
Ya no puedo más Alex… por favor no tardes en venir por mi… te lo ruego… ven ya…. TE AMO
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