19 de abril de 2020

La niña en el transporte

Sabes Alex, como no se hasta cuando termine la cuarentena, estoy tratando de seguir una rutina, así que, siendo domingo, me toca lavar y limpiar la casa, extrañamente me he despertado temprano, así que en cuanto lo hice abrí las ventanas y junté toda la ropa sucia, que posteriormente subí al cuarto de lavado para comenzar a lavar.

Mientras se lavaba la primera carga, que incluye la colcha que uso todos los días y la cubierta del sofá y silla, preparé un rico desayuno que, extrañamente, devoré en un dos por tres, así que me ha dado tiempo suficiente para limpiar la casa, barrer, trapear y darme un buen baño.

Justo cuando hablaba con mamá por teléfono vi que el ahijado caminaba tranquilamente en compañía de Eve, de momento no la reconocí, tuve que verla un poco más para estar segura, y pensar que cuando la conocí era una niña y ahora ya es toda una mujer, pero bueno, el caso es que de momento me molestó el hecho de que estuviera en la calle y ambos sin protección, justo cuando pensaba eso resonó en mi cabeza la frase que solías decirme cuando me enojaba con mi sobrina: “No es tu hijo”.

Y bueno, esa frase me ayudó para relajarme bastante, tanto que me animé a romper un poco mi confinamiento y visitar, de forma rápida, al Ing. Harper, así que me preparé para salir, por supuesto tomando todas las precauciones necesarias, usando cubrebocas, ropa de manga larga y llevando lo menos posible.

Digamos que hasta aquí todo iba bien, hasta que en el transporte me tope con un par de niñas que pedían dinero, extrañamente vi que en la misma estación en la que yo subí, el policía las dejó pasar usando la tarjeta de cortesía, lo que me hizo pensar que le dan su correspondiente dinero, pero bueno, entraron al vagón y apenas dijeron una estrofa de una canción e inmediatamente comenzaron a pasar por todas partes para pedir una moneda.

Situación tan común en el transporte, solo que cuando se acercó a mí, mi reacción fue de alejarme de ella, creo que hasta salté un poco, por supuesto la niña se enojó y comenzó a hacerme burla de que me iba a contagiar y no sé qué más, hasta le contó a su hermana lo que había pasado y ambas se me quedaron mirando, por supuesto que no les dije algo, no tenía pensado bajarme a su nivel ni tratarles de explicar el riesgo que corren, y pues como verás Alex, la gente sigue siendo tan ignorante.

No dure mucho en casa del Ing. Harper, me vine a la casa directamente, y al llegar me quité toda la ropa, me di un buen baño y desinfecté todo, con decirte que la ropa la colgué y dejé por el boiler para que se aireara un poco, basta con que yo me cuide y cuide a mi mamá, lo demás no importa.

Te extraño tanto Alex… duele estar así… TE AMO.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario