1 de septiembre de 2018

Retomando la charla de ayer

Hoy me he levantado temprano, seguí al pie de la letra la lista de cosas que iba a llevarle a mamá, así que no he olvidado nada, además le lleve un frasco de pasitas ya casi cristalizadas y semillas de girasol caramelizadas, que no me he comido y antes de que se echen a perder prefiero que ella las use, así que mi bolsita, aunque un poco vacía, estaba pesada.

El único pero es que no tenia cambio suficiente, por lo que tuve que esperar a que pasara el transporte que me deja a una cuadra de donde vive mi mamá, y de ahí a caminar, cuando llegue la encontré en su casa, ya con todo listo para hacer el jugo de zanahoria, así que le ayude mientras ella calentaba el desayuno, que resulto ser de la misma comida que me lleve la semana pasada, me ha contado que no pudo dormir bien pues sus vecinos se pelearon de nuevo y comenzaron los portazos, por lo que mejor se fue a dormir al sofá en la sala, pobre.

Al terminar nos fuimos al rodante, donde encontramos de nuevo al chico que nos deja escoger la fruta, solo que mamá no se agacho para nada y terminé un poco dolida de la espalda por agacharme tanto, ni hablar, esta vez solo compramos un kilo de cerezas, ya que yo aun tengo en casa, y aunque no pensábamos comprar mucho, terminamos con las bolsas llenas, pero fue productivo, porque no solo era fruta, también verdura y cosas que mamá necesita.

Ya en casa le marque a tu hermana y quedamos de irnos a las 2.30 de la tarde, como ya es su costumbre, solo que me dijo que cuando vaya conmigo ya no irá a comer pues se presiona mucho, ya no le dije nada porque es cosa de ellos, lo que me saco de onda es que ahora resulta que su nuera come muy despacio, algo extraño pero bueno, poco a poco me confirma una loca idea que llegue a tener hace tiempo, la de que tu sobrino sigue tus pasos Alex, pero bueno.

De camino tocamos de nuevo el tema de ayer, y nuevamente me hizo mención del vecino, de quien ya no se me hace extraño que hablen mal de él, sin embargo seguiré su consejo y andaré más con pies de plomo, con ella ya son dos personas quienes me dicen lo mismo, pero bueno, bien me lo tengo de merecido por andarme metiendo en cosas que no debía Alex, eso de ser representante de la calle es un lio, en cuanto pueda me deslindo de eso y listo.

El resto del día me lo he pasado en casa, me he acomodado el cabello y visto una serie, bastante buena, aunque no sé si te gustaría como a mí, seguramente sí. Te extraño mucho Alex.

Alex… ya ven por mi… no tardes… TE AMO.

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