18 de abril de 2018

El botiquín de la empresa

Hoy he tenido que levantarme mucho antes para ir a la nutrióloga, no negaré que al principio pensé en no ir, al final lo hice y, aunque con miedo, entré a consulta, para sorpresa mía no me ha ido tan mal, solo he subido un poco de peso, quizá debido a que he estado comiendo bastantes galletas de nata, porque ejercicio si he hecho Alex, pero bueno, solo debo afinar nuevamente algunos puntos y listo.

Como fui la primera en llegar, he esperado a Margarita para irnos juntas, así que de ahí hemos hecho algunas paradas, la primera ha sido al banco, donde por suerte no encontré mucha gente y pudimos salir rápido, de ahí pasamos a la farmacia, más que nada para aprovechar la cuponera que hace semanas me había dado, pero oh sorpresa, solo se podía usar una vez al día.

No se bien que cara habremos puesto, o quizá la señorita que nos atendía se apiado de nosotras, porque le explicamos para que íbamos a hacer las compras y si podíamos dividir la lista de tal manera que pudiéramos usar todos los descuentos, así que al principio lo pensó, luego pidió autorización y al final accedió a nuestra petición.

Así que la lista que llevaba fue surtida en su totalidad Alex, hace tiempo nos dimos a la tarea de hacer un listado de medicinas comunes que poner en el botiquín de la empresa, y como Vic me dio luz verde pues aprovechamos, además Margarita ha podido comprar unas gotas para su mamá, situación que fue conveniente para ella pues, para no variarle, salían un poco caras.

Al final terminamos yendo a la tienda para comprar un contenedor y poder almacenar las medicinas, además de un pequeño bote de basura para la cocinita, pero como bien sabes lo tacaño que suele ser Vic, tuve que sacar las facturas de todo y desglosárselo en un archivo, aunque al final me pidió más detalle, que, por supuesto le envié, dejaría de ser Vic.

Ya en la oficina, me he dado a la tarea de etiquetar cada frasco y caja para que no haya confusión y las he acomodado en la caja, le explique un poco a Don Jorge, Omar y hasta a Vic, así que terminé el día laboral con una estrellita en la frente.

En casa he hecho lo normal, ir al gimnasio, charlar con mamá y regar un poco las plantas, pero sobre todo me has hecho mucha falta Alex.

Alex… ven por mi… ya no quiero seguir aquí… TE AMO.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario