18 de agosto de 2017

Sumamente adolorida

Justo cuando la alarma sonó, traté de levantarme solo que todo el cuerpo me dolía Alex, así que preferí quedarme en cama un poco más, así estuve hasta las 8 de la mañana cuando me decidí en mandarle mejor un mensaje a Vic avisándole que tenía infección en el estómago y no iba a poder ir a la oficina, solo que como deje la computadora me abstuve de ponerle que haría “home office”.

Volví a quedarme dormida no sé cuántas horas más, creo que me vine levantando de la cama casi a las 11 de la mañana y de nuevo comprobé el dolor que sentía en el cuerpo, principalmente en la espalda, así que preferí acostarme en el sofá y mirar un poco la televisión, mientras desayunaba algo rogué porque no fuera viernes de flores, el solo pensar que tendría que ir hasta Jamaica me hizo estremecer.

Tiempo después recibí una llamada de Cecilia diciendo que no iría a comprar flores debido a que mañana va a ir al médico, creo va a Toluca, no estoy segura, pero ese fue el pretexto que me puso, sinceramente lo agradecí, solo que me dejo pensando ya que en varias ocasiones me sucede lo mismo Alex, deseo algo y se cumple, ojalá pudieras ayudarme con lo que tengo en la cabeza, que tanta falta hace.

Y así estuve todo el día, recostada en el sofá, moviéndome lentamente aunque después de un largo baño me sentí mejor, hasta estuve a punto de ir a ver a la nena, solo que un movimiento me hizo desistir y preferí quedarme en casa, encerrada y sin salir, por supuesto que no le he dicho a nadie, a mamá le marque pasadas las 5 de la tarde, muy linda ella me preguntó si iría al gimnasio y después de escuchar mi negativa se quedó más tranquila, según ella no debería ir tanto al gimnasio.

Lo que si he estado haciendo es comiendo mucha azúcar Alex, de alguna manera me reconforta un poco, sé que está mal y que la nutrióloga me va a regañar, pero así me siento mucho mejor, azúcar + naproxeno + ketorolaco y diclofenaco para aliviar los males, un coctel un poco loco, pero por ahora mantiene a raya el dolor, sobre todo el de espalda.

La que me llamo por la noche fue la comadre para preguntar como seguía, no sé que cara haya puesto ayer o como me vería, realmente ha sido un poco extraño pero se agradece la preocupación o quizá solo fue un detalle por lo que pasó ayer.

Alex… ven ya por mi… no puedo más… no tardes… TE AMO.

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