20 de agosto de 2017

Las historias de miedo

Una noche de insomnio Alex, sin planearlo me quedé dormida hasta las 3 de la mañana, entre que veía las redes sociales y bromeaba con un tipo que contó historia de miedo, pues no pude dormir del todo, prácticamente me enganche con su voz que es como de locutor, además de que estaba enfermo y de las 3 historias la que más miedo me dio ha sido la que relato de Santa María la Rivera, del tipo al que le dispararon en la cara y se parece en el quiosco pidiendo que le ayuden a buscar parte de su cabeza y ojo, vaya que me dejo pensando, tuve que repetirme varias veces que tanto tu como tathú cuidan de mi.

De no ser por la llamada de la comadre, creo, me hubiera despertado mucho más tarde. Cuando vi el reloj eran poco más de medio día, en la llamada me decía que la vecina de un lado había barrido su calle y la basura, que contenía arena, la junto en la entrada de la casa, no sé que más dijo, pero me hizo salir de la cama y echar un vistazo y efectivamente vi mucha arena en la entrada, pero ni de loca baje a barrerla.

Mientras desayunaba comencé a lavar la ropa, así que a la 1 ya estaba todo listo y en suavizante, luego estuve charlando con Perla, quien no para de quejarse y decir que está harta de su trabajo y horario, pero en si no hace nada, eso de decir que necesita otro trabajo sin buscarlo es algo absurdo, si realmente ya no quisiera está ahí pues renuncia y busca otro trabajo, solo que las cuentas no dejan de llegar mes a mes.

Como quede de salir con ella a caminar me vestí y a las 5 de la tarde salí para comprar un poco de nueve con los Vallejo, pensé en comprar 3 vasos, pero solo encontré un sabor que me agradara, además estos días he estado comiendo mucha azúcar y temo que salga mal ahora que vayamos con la nutrióloga, pero bueno.

Más tarde salí a caminar con ella, mientras lo hacíamos le comenté que me debía un apagador y ella, con su manera tan delicada de decirme, me dijo que no, que según ya me los había entregado, pero no es verdad Alex, ya ni para que decirle o alegar más, con ella no se puede y prefiero llevar las cosas en paz, además al volver me ha dado un poco de arroz con leche, que seguramente está rico y he guardado en el refrigerador.

Ya en casa he continuado con la molestia en los brazos y un poco adolorida la espalda, creo que si me lastime feo, ni hablar, estoy a casi nada de ir con el doctor, pero eso de ir y que me recete lo mismo que estoy tomando pues no es viable, lo que si es que aprovecharé la oferta de mañana e iré a comprar más medicina para el dolor y desinflamar que ya no tengo en casa.

El resto del día me lo he pasado mirando películas y continuando con la serie, que por cierto ya voy en la temporada 7 y apenas están saliendo los capítulos. Además, me he disgustado con mamá debido a que ha subido a la azotea para asegurarse de que no le roben el agua, me enojo tanto que casi le doy tremendo regaño, ya parece una niña, sabe bien que no debe subir y lo hace, como me enoja cuando se porta así.

Y te cuento que mientras charlaba con el vecino Eduardo, escuchamos balazos, él me dijo que eran balazos y yo pensé que eran cuetes, al final me ha dado miedo Alex.

Alex… me siento sola… me haces falta… ven ya por mi… TE AMO.

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