Aunque le avise a Vic que hoy llegaría tarde a la oficina, me he levantado temprano, eran las 8 de la mañana cuando mamá y yo íbamos de salida para ir al hospital, todo iba bien hasta que mamá comenzó a dar órdenes, sin más ha dicho “Para un taxi”, pero bueno, así lo hice y por suerte pasaba uno vacía a esa hora.
Solo que el chofer no dejaba de mandar mensajes, todo el trayecto desde la casa al hospital se la paso mandando mensajes cual niño, o más bien puberto, creo que estaba en una de las crisis que les da a los hombres o muy necesitado de sexo pues además miraba un tanto morbosamente a cuanta mujer veía, he de reconocer que con nosotras se portó muy amable, pero como iba más concentrado en leer o mandar mensajes presté más atención al camino y sobre todo el tráfico.
Y ya en el hospital nos topamos con bastante gente que esperaban consulta, así que mientras mamá iba a buscar un lugar para sentarse espere cerca de la recepción, mire mientras anotaban las citas, organizaban los papeles y hasta cuando un señor casi se pelea con la encargada por un papel.
Ha sido decepcionante que, ya estando ahí, nos cambiaran la fecha, ahora será hasta octubre, salimos de ahí y nos fuimos al restaurante que siempre vamos, aunque esta vez no me ha gustado el bufete y casi he comido solo salchichas, por supuesto reclamé, solo que no sirvió del todo ya que nos cobraron de forma normal, creo que será la última vez que vayamos ahí.
De ahí nos fuimos a la casa donde esperamos al señor Martin para que llevara a mamá a su casa, mientras preparaba mi comida para irme a la oficina, donde al llegar Vic me pregunto si había llevado o no a mi mamá, le explique y no dijo más, así que me puse a trabajar y sacar algunos pendientes.
Hoy si he ido al gimnasio, he concluido la rutina de pierna y me vine a la casa, justo a tiempo pues estaban comenzando los truenos, aunque no llovió, pero si hizo frio, así que ha sido una noche en la cual me has hecho mucha falta Alex, bueno no solo hoy, siempre me haces falta, te extraño muchísimo.
He cenado la ensalada que no me comí en la oficina, me lleno bastante con la nueva dieta que me ha mandado Greisa, espero funcione Alex, creo que deberé decirle del ansia que me da por comer azúcar y pan, o más bien pasta.
Alex… ven ya por mi… no tardes… ya no quiero estar aquí… TE AMO.
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