10 de junio de 2017

Apartando el colchón

Sábado de levantarme temprano, aunque el despertador estaba programado desde las 8 de la mañana lo hice como a las 8:30, he salido de casa poco antes de las 9, organicé todo lo que debía llevar con mamá y me pude en camino, solo que me he tardado un poco más de lo acostumbrado en llegar, aunque lo hice justo a tiempo pues el camión de la basura estaba en la primaria.

Así que mientras ella se preparaba, he hecho mi jugo de zanahoria, luego junté la basura y salí para tirar la basura, sigo sin entender como algunas personas le vale gorro no hacerlo, hay un montón de basura afuera de la casa de Raúl, su familia de plano no la tira, y eso que es muy poco lo que deben de caminar, pero sin mentirte había bastante como para llenar 3 o 4 costales.

De ahí hemos ido a comprar unos mixiotes de carnero, la semana pasada los vimos y hoy fuimos a comprar unos, uno para comer entre las dos y los otros dos para que cada una que se quede con uno. Y han estado bastante rico, aunque el sabor me pareció bastante fuerte, en comparación con otras carnes, pero de vez en cuando no hace tanto daño.

La primera parada que hemos hecho hoy ha sido ir a ver el colchón a la tienda que vi por internet, solo que nos equivocamos y terminó siendo otra, aunque sirvió para probar otros colchones, al final me ha gustado mucho uno, pero el precio salió del presupuesto Alex, así que fuimos a hacer otras cosas para que lo pensara.

Caminamos a un centro comercial, donde busque colchones, pero nada que ver, había unos bastante económicos, pero nada confortables, ahí compramos algunas cosas y terminamos yendo a la bodega pues las salsas cátsup estaban muy caras, terminamos de hacer las compras y ahí fue donde mamá me dijo algo que solías decir mucho Alex.

Ella simplemente me dijo: “Que no lo vales?, para que guardar tanto el dinero, Alex me dijo que era mejor gastarlo en mí que guardarlo para que al final alguien más lo disfrute”, bueno algo así me dijo, y de la nada llegaste a mi mente Alex, diciendo que lo comprara, no sé exactamente lo que pensé, pero recordé las veces que hice lo mismo y eras tu quien me convencías en comprar las cosas, así que terminé pidiéndole prestado a mamá para hacer el apartado.

Será el sábado próximo cuando lo lleven a casa, me he asegurado que no me cobren el envío y sobre todo que estén dispuestos a subirlo, por supuesto que deberé mover unas plantas y despejar para que no tengan tanto problema, pero si subieron uno podrán subir otro. Sé que me va a doler mucho cuando se lleven el colchón de la casa, el colchón que hemos compartido Alex, donde hicimos tantas cosas, desde dormir, comer y muchas otras más.

Como dice mamá, me dolió el codo, pero sé que hice una buena compra. En fin, después hemos ido a la pastelería donde mamá compro un pastel pequeño de zanahoria, mitad para ella y mitad para mí, ahí fue donde me di cuenta lo tarde que era, ya casi las 2 de la tarde y aún faltaba ir por las cosas para irme a casa, así que antes de salir de casa de mamá le marque a Cecilia para vernos a las 3:30 y llevar las flores, sabes que no me gusta llegar tarde.

Al llegar metí la comida al refrigerador y pasé por ella, quien ya estaba esperándome, esta vez nadie nos ha acompañado, pero hemos tenido una charla muy amena, aunque hoy preferí dejarla hablar, casi no he hablado, solo asentía y daba pequeñas opiniones.

Traté de no hacerla llorar, aunque con algunas cosas lo hizo, no mucho, pero lo hizo Alex, la que si la hizo llorar ha sido la señora Luisa con sus comentarios, pero pues creo que aún es inevitable que lo haga, lo que, si me dijo, de nuevo, que le está dando mucho sueño, que su hijo le pregunto si no descansaba o que quizá sea bueno llevarla al médico, pero le dije que a mí me paso lo mismo con tu partida, dormía mucho y comía muy poco, aunque ahora es más el insomnio que otras cosas.

Como ayer le dije que cuando quisiera la acompañaba a comprar tamales a Sta María la Ratera, de la nada me dijo que, si íbamos, sinceramente quería llegar a acostarme, pero cedí y fui con ella, aproveché para comprar 3, uno oaxaqueño y dos de dulce, de los cuales 2 de ellos me han servido para comer, aunque al final me haya dolido el estómago y deje poco de uno, el ultimo terminé metiéndolo al congelador, ya otro día lo comeré.

Ha comenzado a llover mucho, siendo pasadas las 9 de la noche me iré a dormir Alex, me siento muy cansada, y como dice mamá, hoy hice muchas cosas.

Alex… me haces tanta falta… ven ya por mi… TE AMO.

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