9 de noviembre de 2016

La charla con Anabel

Hoy ha estado lloviendo desde que me desperté, creo que no dejó de llover desde ayer por la noche por lo que resulta complicado salir de la regadera, creo que ya necesito buscar de nuevo aceite para bebe, el que tenemos ya huele medio feo Alex, además el frasco se ve mal, espero que esta vez que vaya con mamá pueda comprar un frasco.

Vic se ha ido de viaje, así que hemos estado muy tranquilos en la oficina, además hoy Margarita no ha venido a trabajar, creo que se ha ido a un curso de un proveedor por Insurgentes, así que hay menos gente en la oficina, a medio día solo estábamos Don Jorge, Omar, Silver, Sergio y yo.

Para sorpresa mía he recibido una llamada de Abril, mi prima de Tampico, me dice que va a venir con su esposo, llega el sábado en la mañana y su idea es comprar muchas cosas en el centro pues tienen una pequeña papelería que debe surtir, sobre todo por las fechas Alex, además de que quiere comprar un vestido para una fiesta.

Su idea es quedarse en un hotel cerca de la Merced, por supuesto le he dicho que no es buena idea pues en esa zona no hay hoteles familiares, quiere ir también a Tepito, ahí le comenté que ya no es como antes y ahora resulta bastante peligroso, sobre todo para alguien que no es de la ciudad. Le he recomendado la calle de 20 de noviembre para buscar su vestido, pero creo que seguramente quiere algo más económico, así que le preguntaré a Margarita algunas calles para recomendarle.

Hasta aquí todo iba normal, pero al llegar la hora de la comida me he encontrado con Anabel, la pareja del Pato, hemos ido a comer a una fonda cerca de la oficina y ahí me ha contado algunas cosas que le han pasado al lado del Pato, sobre todo la forma en que ha cambiado y la mamitis tan aguda que ha manifestado desde que llegaron a la Ciudad.

Sinceramente no puedo creer todo lo que me dice, sobre todo la forma en que la humilla, no entiendo como alguien puede soportar el mal trato verbal, al menos yo no lo haría Alex, aunque tu jamás me has tratado de la forma que ella describe.

He tratado de tranquilizarla un poco, pero es complicado Alex, continuamente le he dicho que ojalá estuvieras de este lado para ayudarla un poco más, aunque se bien lo que dirías: “No te metas en una relación”. Al hemos quedado que todo lo hablado se queda entre las dos y si me es posible hablar con el Pato hacerlo, pero muy cautelosa para que no haya malos entendidos o luego ella pague los platos rotos, dudo mucho que me llegue a tratar mal, sobre todo por ti Alex además de que yo no me quedaría callada.

En el gimnasio todo ha estado tranquilo, este mes he visto más mujeres que en otras ocasiones, espero disminuyan un poco, me gusta más estar en lugares con poca gente.

Alex… un día que me has hecho tanta falta… dónde estás?... ya vienes por mí?... TE AMO.

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