Pensando que vendría la ratita me he salido temprano de casa, con decirte que llegue mucho antes de las 9 de la mañana, hasta Don Jorge se sorprendió. Vic como siempre estuvo metido en su computadora cuando pasé a saludarle.
Y ha sido un día bastante tranquilo Alex, solo he estado dando seguimiento a las cotizaciones que me han hecho llegar con respecto al seguro que pretendemos adquirir y resolviendo algunos problemas con la nube, creo que ya nos queda chica Alex, además de que no la usan para lo que realmente es, solo almacenar información, siguen usándola para compartir y trabajo colaborativo, pero bueno.
Cuando volví a casa lo he hecho intencionalmente tarde, más con la esperanza de no toparme con tu mamá y me insista con la ocupación de los cuartos de arriba, sobre todo porque el sábado se me salió contarle a Cachito lo que le paso a la vecina de alado.
Resulta que el sábado me contó que se metieron a su casa a robar, al principio me alarmé pues es muy fácil pasar de su casa a donde vivimos, pero después me confesó que solo le robaron una escalera y dos palas que dejo en el patio, así que analizando bien las cosas era obvio y solo cuestión de tiempo pues siempre tienen un relajo en su patio, cosas ahí dejadas y demás.
Por fortuna dio resultado mi plan y mientras caminaba a la casa le he marcado a Cecilia para avisarle que ya había llegado. Después de llamar a mamá y escuchar la misma historia de la familia de su hermana me deja pensando pues son puras tonterías Alex, sus problemas se resolverían si se sientan a charlar y hablan como lo que son, unos buenos cristianos.
Y es aquí donde imagino tu sonrisa burlona mencionando eso, que son buenos para dar consejos matrimoniales, pero no para llevarlos a cado. SI reamente se enteraran en su congregación el cómo son estoy segura que dejarían de ir y dar limosnas.
En el gym he tratado de usar los pensamientos negativos, siempre relacionados con lo de ese domingo, con fuerzas para completar las rutinas, por ahora me ha funcionado, aunque no dejo de pensar en lo que la nutrióloga me dijo: “Más cardio”, pero eso de pasar 40 minutos es bastante Alex, quizá 20 al principio y al final depende de cómo me llegue a sentir.
Al menos hoy no me quedaron ganas, terminé todo lo que me dijo Mauricio y me vine a casa, cociné un poco de salmón, espero quedarme dormida temprano y no despertarme a media madrugada.
Mamá sigue mejor, según ella ayer después de despedirme y cerrar la puerta sintió una punzada en una pierna, hoy se lo ha pasado descansando y dándose masajes. Sabes… a veces dudo mucho de estos padecimientos, pero, aunque le pregunté si quería que fuese por ella se negó. En fin.
Alex… me duele mucho tu ausencia… ven ya por mi… TE AMO.
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